El anunció que realizó la NBA este jueves 4 de junio, con la aprobación de la Junta de Gobernadores sobre el formato a usar para reiniciar la temporada y ponerle un cierre a la 2019-2020, luego de la suspensión del 11 de marzo por al avance del coronavirus COVID-19, hará que 22 equipos vuelvan a la acción (sería desde el 31 de julio) para la reanudación. Es decir que ocho conjuntos, los que se encontraban en la parte de abajo de las posiciones, entrarán en vacaciones a la espera de la 2020-2021.
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El parate por la pandemia cortó ocho realidades diferentes que, por más que estaban relacionadas a equipos del fondo, nos dejarán sin algunas historias interesantes que íbamos a ver en el cierre de la Fase Regular de haber seguido su curso normal. Y aquí estamos para hacer un de informe de despedida de cada uno de esos ocho equipos.
Tras haber empezado por los Golden State Warriors y los Minnesota Timberwolves, es el momento de pasar a la Conferencia Este con los Atlanta Hawks. Con cierto sabor de decepción por juego y resultados, el equipo de Trae Young cierra la 2019-2020 con más puntos negativos que positivos. Se esperaba un mayor crecimiento colectivo de una franquicia que consiguió un refuerzo extraordinario en febrero: Clint Capela.
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La despedida de Vince Carter
La jornada de NBA antes de la suspensión por el coronavirus, la del 13 de marzo, tuvo como uno de los últimos partidos el duelo entre Hawks y Knicks en Atlanta. Los neoyorquinos ganaron el partido, pero lo más destacado del duelo es que es, en teoría, el de la retirada de Vince Carter.
El mítico alero de los Raptors y de notables pasos por equipos como New Jersey Nets, supo reconvertir su rol de estrella a jugador complementario con importante éxito. Rookie del Año en la primera temporada sin Michael Jordan tras el anillo de 1998, Carter es una de las caras más reconocibles del siglo XXI en la liga.
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Sus últimas dos temporadas en Atlanta han sido como jugador de banco y de rol limitado. Orlando, Phoenix, Dallas, Memphis y Sacramento fueron sus anteriores destinos, hasta que en los Hawks puso fin a una carrera que será siempre recordada. Si bien el anillo queda pendiente en el palmarés, Carter ha dejado un enorme impacto en Canadá, además de ser considerado el mejor volcador de la historia.
En ese partido de despedida, Carter vio al estadio corear su nombre para disfrutar de unos últimos minutos. Tuvo 13 sobre el parqué y anotó 5 puntos, incluido su último lanzamiento, un triple como broche final. Sin embargo, pese a ese último tiro, la despedida tiene un toque amargo. El timing golpea a un jugador al que le hubiese gustado irse de otra manera.
VINCE FOREVER. pic.twitter.com/e0XNrvbROS
— FOX Sports: Hawks (@HawksOnFSSE) March 12, 2020
¿Se plantearía Carter una temporada más para despedirse? Lo cierto es que el pasado verano tardó varios días en firmar contrato. Otros veranos ha sido un jugador codiciado pese a la edad, ya que tiene experiencia y puede aportar como tirador. Sin embargo, Vinsanity ya tiene 43 años, ha jugado en cuatro décadas diferentes y el gas abandona sus piernas. Aunque duela la forma, esta es su despedida.
El debut de Clint Capela
El principal problema de Atlanta es la falta de veteranos. Escasean figuras de experiencia alrededor de los Trae Young, John Collins, Kevin Huerter, De'Andre Hunter y Cam Reddish. En el ataque falta regularidad, aunque los elementos están ya ahí. Lo que es desastroso es el desempeño en defensa: falta comunicación, faltan cuerpos de mayor tamaño y se echa de menos una agresividad que este proyecto no tiene.
Sin defensa es imposible ganar y construir un proyecto de anillo. Es por esa línea donde los Hawks necesitan más ayuda. Se puede ganar con un base de enormes problemas atrás como Young, otros equipos como los primeros Warriors de Mark Jackson y los Rockets de un recién llegado James Harden montaron equipos muy competitivos con su estrella siendo un agujero negro.
Atlanta ha sido la tercera peor defensa de la NBA en la 2019-2020. Sin duda el puesto a mejorar era el de cinco titular. La primera opción fue Alex Len, útil para el banco, pero muy corto como ancla defensiva titular al lado de Collins. Bruno Fernando, el rookie suplente, está lejos de ser titular en esta liga. Hacía falta un refuerzo urgente, tanto por la defensa del equipo a largo plazo como para contentar a Young.
Los Hawks cerraron el 5 de febrero un traspaso a cuatro bandas en el que se hicieron con Clint Capela. El precio del pivote suizo fue Evan Turner en su último año de contrato, la segunda ronda de 2024 de Atlanta y la primera ronda de 2020 de los Nets. Es decir, solo dieron una ronda propia -una segunda- y un jugador que era prescindible para el proyecto. Movimiento de diez.
Capela llegó lesionado y desde la franquicia informaron que tardaríamos unas semanas en ver su debut. Sin embargo el coronavirus llegó antes que su estreno y los aficionados de Georgia tendrán que esperar. El pivote tiene contrato hasta la 2022-2023 y el máximo salario a percibir serán los 19,5 ($19,586,957) de esa última campaña. Capela tiene 26 años y encaja por estilo y edad, además de tener experiencia en Playoffs. Máquina de doble-dobles, promedia más de 13 puntos y 10 rebotes en las últimas tres temporadas, gran mejora como protector de aro y socio perfecto en el pick&roll para Trae Young por su capacidad para finalizar por encima del aro.
¿Dudas alrededor de John Collins?
Está fuera de toda duda que Collins es uno de los grandes proyectos de interiores ofensivos de la NBA actual. Su progreso es evidente cada año al añadir a su repertorio nuevas armas, muy útiles en el baloncesto moderno. El tiro de tres, su volumen y acierto suponen el mayor ejemplo.
Sin embargo, John Collins tiene solo un año más de contrato y le toca negociar con Atlanta en los próximos meses una renovación. De no cerrarla antes del comienzo de la 2020-2021, a falta de saber cómo son las fechas, sería agente libre restringido en la offseason de 2021.
¿Son compatibles Capela y Collins? Quizás esto desplazaría demasiado al 20 de los Hawks a un rol de tirador, cuando sigue realizando la mayoría de sus intentos (47%) cercanos al aro. A nivel defensivo y reboteador, Capela es todo lo que necesita Collins. Pero la directiva de Atlanta no ha podido ver estos meses a los dos juntos. No debe descartarse un traspaso del joven interior.
Otros dos motivos que empujarían a pensar que los Hawks pensarán en su traspaso, o al menos tantear el mercado, es que Collins pedirá el máximo salarial. Esa es su intención. Y, también, las dudas con su consistencia. Entre lesiones y la sanción de inicio de temporada, Collins tiene su tope en los 74 encuentros del año rookie, cuando era jugador de banco y pieza más complementaria.
Las dudas alcanzan los niveles de su innegable calidad en ataque. Tras terminar la 19-20 con 22,2 puntos, 10,3 rebotes, 1,4 asistencias y 1,6 tapones en 33,4 minutos, con un 39% en triples, Collins puede protagonizar uno de los culebrones de la próxima pretemporada.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.