En un partido que se mantuvo parejo mientras ambos tuvieron a sus titulares en cancha, pero que se abrió por completo una vez que ingresaron las segundas unidades, los Boston Celtics se impusieron a los Phoenix Suns por 117-103. Ambos conjuntos quedaron con marca de 1-1 en esta preparación para el reinicio de la Fase Regular 2019-2020.
El mejor del ganador resultó ser Jaylen Brown, autor de 21 puntos, con un efectivo 7-13 de cancha en 28 minutos, aunque estuvo particularmente callado en otros rubros: 1 rebote y 0 asistencias. Además, en Boston se destacó la tarea de Gordon Hayward con 17 puntos y 6 rebotes, producto de un 6-10 de campo.
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En los Suns hubo 17 puntos y 9 asistencias de Devin Booker, quien consiguió varias de sus conversiones en transición, pero estuvo muy poco eficaz en los ataques fijos (5-15 de campo). A su vez, también fue interesante lo de Mikal Bridges (16 tantos) y la producción de la dupla interior, con Dario Saric (12 puntos y 8 rebotes) y DeAndre Ayton (11 puntos y 7 rebotes), lanzando en ambos casos 5-8 de cancha.
La vuelta de Kemba
Más allá de la victoria, la mejor noticia del encuentro para los Boston Celtics pasó por el regreso de Kemba Walker, ya recuperado de su lesión de rodilla. El base salió como titular y aportó 6 puntos en 9 minutos, bajando un rebote y lanzando 2-6 de campo.
Kemba is BACK 🥶
— SLAM (@SLAMonline) July 26, 2020
(via @celtics)pic.twitter.com/NcmRCKGP9E
Estaba claro que Stevens iba a llevar de a poco a Walker en su vuelta a las canchas y tal fue el motivo de su poca participación. Los Celtics necesitan al mejor Kemba posible para subir sus aspiraciones en el Este y seguramente seguirán utilizando esta preparación para ponerlo a punto físicamente.
Boston cierra su pequeña pretemporada el próximo martes 28 de julio, enfrentando a Houston Rockets. Su debut en los seeding games será el viernes 31, nada menos que ante el puntero de la Conferencia, los Milwaukee Bucks.
La vuelta de Ricky
El que también hizo su retorno, luego de perderse el primer choque de exhibición, fue Ricky Rubio. El español dejó excelentes sensaciones, más allá de que sus números no fueron impactantes: 6 puntos y 4 asistencias, con un 2-5 de cancha en 19 minutos.
Sin embargo, lo cierto es que mientras Rubio estuvo en cancha, la ofensiva de Phoenix fluyó e incluso pudo mostrarse superior a uno de los mejores conjuntos de la NBA. Muy buen movimiento de balón, conexiones exquisitas en transición y hasta algunos pasajes defensivos interesantes, sobre todo ligados a un Mikal Bridges que cada día luce mejor en ese campo.
El problema fue que cada vez que Ricky descansó, los Suns se cayeron en picada en ambos costados. Los números sostienen la teoría: Rubio terminó con un +/- de +8, mientras que los tres bases que Monty Williams juntó en cancha ante sus salidas, Ty Jerome (-20), Cameron Payne (-14) y Jevon Carter (-16), tuvieron un registro individual diametralmente opuesto. Así de grande fue la brecha entre la primera y la segundad unidad de Phoenix.
Los titulares de Phoenix se muestran capaces de competir, aún en este contexto de absoluta élite. El banco por otra parte... digamos que es una historia muy diferente.
Tatum, impreciso y forzando
El que sigue lejos de su mejor nivel es Jayson Tatum. Luego de lanzar 1-6 de cancha en la derrota ante Oklahoma City, el alero tuvo una mejor producción en términos totales (16 puntos y 9 rebotes), pero se lo volvió a ver impreciso, forzando situaciones y tomango algunas decisiones cuestionables.
Su 6-17 de campo, acompañado por apenas 2 asistencias y un 2-4 en libres, califica su actuación.
Por ahora, en estos primeros dos partidos, el nivel de Tatum está muy lejos del que supo tener en los últimos meses previos al parate. El triple en step back no está entrando al mismo ritmo (37-88, 42% en la Fase Regular) y cuando eso sucede, el cuestionamiento a su selección de tiro sale a flote. Además, tampoco está siendo tan agresivo a la hora de atacar el aro (promedió casi 7 tiros libres entre febrero y marzo).
Nada particularmente preocupante, pensando que se trata de amistosos, pero claramente el alero necesitará de un proceso para recuperar esa forma que parecía haberlo metido en la pelea por ser considerado el segundo mejor jugador de la Conferencia Este, detrás de Giannis.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.