A los 22 años Luka Doncic ya ha conocido el éxito en muchas de sus formas: su último suceso fue el histórico triunfo conseguido con Eslovenia en Lituania ante el equipo local para lograr la clasificación a los Juegos Olímpicos Tokio 2020, la primera clasificación de un representantivo del básquetbol de Eslovenia a la cita olímpica.
La victoria en el Preolímpíco de Kaunas le abrió a Doncic las puertas del que será su debut olímpico: la presencia del crack de Dallas Mavericks es uno de los puntos que generará mayor interés en el torneo que comienza la próxima semana con presencia de más de 35 jugadores de la NBA. El lunes 26 de julio a la 1.40 de la mañana Eslovenia enfrentará a Argentina, actual subcampeón del mundo, en un partido imperdible y con mucho en juego pensando en la clasificación a cuartos de final en un grupo que comparten con el campeón mundial, España y el equipo local, Japón.
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Doncic representó al seleccionado mayor de Eslovenia en dos torneos hasta el momento y todavía no ha sido derrotado: fue el MVP del Eurobasket 2017 en el que Eslovenia fue campeón ganando sus nueve partidos y el MVP del Preolímpico de Kaunas en el que ganaron sus cuatro encuentros. Un marco lo suficientemente exitoso como para generar ansiedad de cara a su participación en Tokio.
Desde que los jugadores de la NBA pueden participar de los Juegos Olímpicos (permitido desde la edición de Barcelona 1992) han habido distintos cracks internacionales que hicieron su estreno en este torneo ya siendo parte de la liga norteamericana, algo que igualmente no es un denominador común en todos los jugadores internacionales ya que varios de ellos llegaron a la NBA con una experiencia olímpica previa cuando eran jóvenes, como Yao Ming, Andrei Kirilenko, Ricky Rubio, Patty Mills, Jonas Valanciunas o Luis Scola por citar a algunos. Por caso, Rubio disputó la final de Beijing 2008 con 17 años. Otros también lo hicieron en la década del 80, tiempo antes de llegar a la NBA y cuando todavía podían representar a sus selecciones, como Drazen Petrovic en Los Angeles 1984 o Toni Kukoc, Arvydas Sabonis y Vlade Divac en Seúl 1988.
Recién a fines de la década del 90 comenzaron a abrirse un poco más las puertas para los jugadores internacionales en la NBA y por eso en Sydney 2000 ya se pudo ver en su debut olímpico a dos jugadores no estadounidenses de experiencia NBA que harían mucho ruido en la liga en los años siguientes: un dos veces ganador del premio de MVP y un tres veces All-Star. Steve Nash jugó para Canadá en aquella cita y Peja Stojakovic representó a Yugoslavia (ya solamente conformado por lo que actualmente son Serbia y Montenegro). El base promedió 13,7 puntos, 6,9 asistencias y 3,3 rebotes con un 45,8% en lo que fue su única presentación olímpica, destacándose con una actuación de 26 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias para vencer al equipo de Stojakovic en fase de grupos en el partido que dirimía el primer lugar. El alero en tanto promedió 10,8 puntos y 4,2 rebotes con poco acierto en el triple, su especialidad (3-17 en el torneo) en lo que también fue su única participación olímpica. Los dos fueron eliminados en cuartos de final: Canadá cayó ante Francia por 68-65 y Yugoslavia perdió por 76-63 con Lituania, dos equipos luego medallistas.
El mayor éxito para un caso similar al de Doncic fue hasta el momento el de Emanuel Ginóbili en Atenas 2004: ya siendo protagonista en la NBA y líder del equipo argentino, el escolta de San Antonio Spurs tuvo un torneo sensacional en tierras griegas luego de no haber podido clasificar a Sydney con la albiceleste. Promedió 19,3 puntos, 4 rebotes y 3,3 asistencias con un 57,6% de acierto en tiros de campo y un 40% en triples. En la final anotó 16 puntos contra Italia para colgarse la medalla dorada y son inolvidables sus actuaciones ante Serbia y Montenegro en el debut, con 27 puntos y un doble agónico ante el equipo campeón mundial, y sus 29 tantos ante Estados Unidos en las semifinales. Pau Gasol fue otro crack internacional de un torneo espectacular (22,4 puntos, 1,9 tapones y 7,3 rebotes de media para un España que acabó quinto) y lo de Carlos Arroyo (18 puntos y 5 asistencias de media), autor de 24 tantos y 7 asistencias en la histórica victoria de Puerto Rico ante Estados Unidos en fase de grupos, a pesar de que luego ambos fueron eliminados en los cuartos de final.
Beijing 2008 tuvo a Marc Gasol colgándose una medalla plateada en su primera experiencia olímpica y ya como jugador de Memphis Grizzlies. El pivote aportó 7,1 puntos y 4,6 rebotes por encuentro para la causa de aquel equipo español en el que era importante pero sin tener rol protagónico. Mayor era la importancia pero menor el éxito de Dirk Nowitzki en la Selección de Alemania: el MVP de la temporada 2006-2007 de la NBA jugó en Beijing sus únicos Juegos Olímpicos y se marchó eliminado en fase de grupos tras apenas conseguir una victoria ante Angola: China sorprendió a Alemania por 59-55 en la batalla entre Yao Ming y Dirk y fueron los asiáticos los que avanzaron a la segunda fase en un torneo en el que Nowitzki promedió 17 puntos y 8,4 rebotes con un 41,7% de acierto en triples, insuficiente en un equipo en el que no tenía grandes compañías.
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En Londres 2012 se estrenaron tres nombres importantes de la historia del básquetbol francés como Tony Parker (15,7 puntos, 3,2 asistencias y 2,8 rebotes de media), Boris Diaw (7,7 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias) y Nicolas Batum (15,5 puntos, 5,7 rebotes y 1,5 tapones) en lo que fue el regreso del seleccionado de ese país a los Juegos Olímpicos tras el segundo puesto de Sydney 2000. Con ellos tres como piezas centrales del equipo, Francia le ganó a Argentina, Túnez, Nigeria y Lituania en fase de grupos y terminó segundo detrás de Estados Unidos, pero fue eliminado en cuartos de final por la España de Serge Ibaka que luego terminó como subcampeona con el entonces jugador de Oklahoma City Thunder que tenía 22 años promediando 8 puntos, 4,4 rebotes y 1,3 tapones por partido y quedando cerca del doble-doble (12 puntos y 9 rebotes) en la final ante Estados Unidos.
En Londres el equipo local contó con Luol Deng, All-Star de la NBA en 2012 y 2013, como su estrella principal. El alero nacido en Sudán pero criado en Inglaterra promedió 15,8 puntos, 6,6 rebotes y 4,6 asistencias para Gran Bretaña, que se fue eliminado en fase de grupos pero estuvo cerca de dar la sorpresa contra Brasil y España y al menos le pudo ganar a China en su última presentación. Los 26 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias de Deng ante España marcaron una de las mejores actuaciones individuales de aquel torneo.
Rio 2016, la última cita olímpica del básquetbol, fue el escenario de la presentación en los Juegos Olímpicos de dos de los pivotes más importantes que tiene la NBA hoy por hoy: el actual MVP Nikola Jokic y el elegido tres veces como mejor defensor de la competencia, Rudy Gobert. El serbio se llevó la medalla plateada luego de promediar 9,1 puntos, 6 rebotes, 1,5 robos y 2,4 asistencias para un equipo que hizo una mala fase de grupos (dos victorias y tres derrotas) pero que venció a Croacia y Australia en la fase de eliminación para subir al podio en su primera participación luego de la separación de Montenegro. Gobert en tanto sufrió otra caída de Francia ante España en cuartos de final: terminó su torneo sin medalla y con un promedio de 5,7 puntos, 7,2 rebotes y 1,8 tapones por partido.
De todos estos casos apenas Manu Ginóbili, Marc Gasol y Serge Ibaka se subieron al podio: no llama la atención con lo complicado y parejo que es el torneo olímpico de básquetbol pero si sirve para poner en contexto lo que intentará Doncic en Tokio, donde una medalla de cualquier color será un logro enorme para sumar a su palmares.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.