Fanáticos NBA: Una pasión desde Mar del Plata hasta Boston

Author Photo
Fanáticos NBA

En mayo de 2015, entre charla y charla de café con su madre y la madre de su mejor amiga, Noelia Cvitanovic recibió una propuesta que le movería el piso a cualquiera, sobre todo a alguien que para ese momento no había salido del país ni se había subido a un avión. Como regalo por recibirse de Profesora de Educación Inicial, su mamá le pagaría un pasaje para acompañar a su amiga y la familia a un viaje a Estados Unidos. Su respuesta, para sorpresa, fue un rotundo no. ¿Cómo puede llegar una negativa así? "Era para julio o agosto, y en esas fechas no hay NBA", cuenta Noelia. Y todo empieza a ser más claro para empezar a conocer a una verdadera fanática de la NBA. O mejor dicho, a una verdadera fanática de Boston Celtics. 

Nace el amor

Para encontrar el punto de inicio entre Noelia, quien vive en Mar del Plata, y la mejor liga del mundo hay que ir hasta 2006. "La empecé a seguir de a poco, recuerdo a aquel Miami Heat campeón. Después llegó el turno de los Spurs de Manu y Oberto en 2007. Pero ninguno lograba 'conquistarme'. Hasta que apareció en mi vida el famoso Big 3", cuenta y hace referencia a Paul Pierce, Kevin Garnett y Ray Allen. Y ahí cambió todo: "Por culpa de ellos, por lo que lograban juntos, lo que transmitían adentro y afuera de la cancha, hoy soy una fanática de los Celtics". En ese equipo también estaba Rajon Rondo, "uno de mis jugadores favoritos y también mi amor platónico. Aunque hoy esté del otro lado (en Los Angeles Lakers), el amor sigue intancto y me sigue pareciendo un base con una inteligencia enorme, uno de los mejores pasadores de la NBA", lo define. 

El día a día es verde

Fanáticos NBA

La evolución tecnológica abre puertas y conecta. De hecho, conectó a Noelia con el pasado glorioso de la franquicia. "En 1992 se retiraba Larry Bird, y yo nací en ese año, por lo que toda la época gloriosa de los Celtics no la pude vivir. Pero hoy está todo a nuestro alcance con internet. Ya perdí la cuenta de la cantidad de documentales y partidos retro que he visto, especialmente de Larry Legend. Es uno de mis grandes ídolos pese a no haberlo visto en vivo. Es una leyenda, y las leyendas viven por siempre", comenta. 

Claro que más allá unirse con el pasado, también vive con todo el presente. "Sigo a los Celtics todo el tiempo y por todos los medios posibles. Hace varios años que tengo contratado el NBA League Pass para no perderme ningún partido y poder verlos donde sea que esté. Mi cuenta de Twitter está repleta de periodistas de Boston, de fanáticos de todas partes del mundo. En Instagram sigo a todos los jugadores, me gusta saber de ellos más allá del jugador en sí, porque es como sentirse parte de una gran familia", relata antes de abrir un ejemplo para graficar que su gusto va más allá de una victoria o derrota.

"Cuando Isaiah Thomas perdió a su hermana e igualmente salió a jugar aquel partido de playoffs en 2017, la emoción fue a flor de piel. Todos los fanáticos de los Celtics estarán eternamente agradecidos, lo que hizo fue inolvidable y va más allá de no poder darnos un anillo o final. Lo veías llorar a él y a sus compañeros, y no podías no emocionarte. Al fin y al cabo, son parte de tu vida, de tu día a día", recuerda. 

Está claro que en esta pasión, una cosa llevó a la otra. Y, casi sin proponérselo, Noelia se encontró con algo más. "A partir de Twitter me fui encontrando con distintos seguidores del equipo por el mundo y también en Argentina. Me gustaba poner en mi cuenta las noticias de Boston, ya que todo lo que había relacionado al equipo era en inglés o de cuentas de España. Viendo que cada vez aparecían más celtas argentinos, se me ocurrió crear @CelticsARG, la cuenta de los Celtics en Argentina. La abrimos con Andrés Villar, otro fanático bahiense del equipo. Empezamos compartiendo todo tipo de información de la franquicia, minuto a minuto de los partidos y demás. Hoy ya es una cuenta instalada, con información, análisis y más", explica. 

El viaje de su vida

Fanáticos NBA

Aquel "no" rotundo en la charla de café con su madre se transformó en un sí tan o más rotundo al conocer que la fecha de viaje cambiaba para febrero. Uno de los destinos era Nueva York. "Lo primero que hice fue ver cuántas horas de viaje había entre la ciudad y Boston. Después, esperar a que salga el calendario para ver si me tocaba algún partido cuando estaba. Me mataba la ansiedad hasta que salió: 27 de febrero, Celtics-Miami en Boston, cuando iba a estar en Nueva York", recuerda Noelia. 

Y el sueño se transformó en realidad. "La espera se hizo eterna, pero llegó el día. A las 5 de la mañana partí rumbo a Boston, con mi bandera de Celtics Argentina. Y obviamente que no pegué un ojo en todo el viaje. Llegamos con mi amiga, que decidió acompañarme, recorrimos universidades, algo de la ciudad y llegó el momento de ir al partido. Nos tomamos el subte rumbo al TD Garden y a medida que iban pasando las paradas, el subte se empezaba a teñir de verde. Me sentía en casa, con mi gente", relata. 

Y llegó el momento de estar en el estadio. Y ya nada fue igual para Noelia: "Estaba completamente emocionada. Los banners colgados, la gente, el espectáculo... Todo fue impresionante. Al lado nuestro estaban sentados un chico y su padre, quienes nos empezaron a hablar y no podían creer que en Argentina hubiera tantos fanáticos de los Celtics. Hoy en día sigo hablando con ellos. Pero bueno, sin dudas que fue la experiencia más linda que me tocó vivir. Es impresionante lo que se siente en ese estadio. Sentía que era mi lugar en el mundo. Me fui emocionada pensando en si alguna vez volvería a vivir ese hermoso sueño. Y estoy segura que lo haré"

Una fan bien completa

Fanáticos NBA

La pasión de Noelia por los Celtics también se puede apreciar en su armario. O mejor dicho, en cualquier parte de su casa. La lista (larga) empieza con ¡seis camisetas! del equipo. "La primera la compré por internet y fue la de Kevin Garnett blanca, en talle XL. Sí, es gigante, pero era la única que había y yo quería tenerla igual sin importar el talle. En esa época era difícil conseguir camisetas NBA en negocios que no fueran la de Manu", detalla. 

La lista tiene variedad: una verde clásica de Bird, la City Edition de la temporada 2017-2018 de Kyrie Irving, una verde de Rondo, otra verde con negro de Isaiah Thomas y una negra de Jayson Tatum. Pero ojo que no se queda ahí. "Además tengo el libro 'La leyenda verde' de Antonio Rodríguez y Juan Francisco Escudero, cuatro remeras (dos con en el logo, una de Rondo y otra de Smart), una campera, un buzo, pijama, bolso, toallón, llavero, un muñeco de Larry Bird de peluche, otro muñeco de Bird que es de colección, gorro de invierno, gorra, un vaso, un parche y más", enumera. ¿Más? Sí. "Del partido me traje la famosa manopla, el vaso de la bebida y, por supuesto, la entrada, que la tengo colgada en un espacio de mi habitación para verla siempre", remarca. 

Y, lejos de conformarse, aclara: "Me falta la camiseta de Pierce y no la puedo conseguir en ningún lado. Ni cuando viajé la pude conseguir. Es mi camiseta pendiente"

La pasión no se explica...

Noelia cierra con un pensamiento que permite comprender un poco más su amor por Boston. "Muchas veces me han preguntado cómo podía ser hincha de un equipo de la NBA, que encima no tiene jugadores argentinos, que no puedo ir a verlos en vivo. Pero juro que sí, que se puede, y que se siente maravilloso ser fanática de un equipo NBA con tanta historia, con fanáticos que siempre están presentes", explica. 

Mar del Plata y Boston está separadas por un poco más de 9.000 kilómetros de distancia. En el caso de Noelia, esa distancia es un simple número. Su pasión por los Celtics no conoce límites. 

Autor/es
Leandro Fernández Photo

Editor Jefe de las ediciones en español de The Sporting News.