Las Finales de la NBA comenzarán este jueves 30 de mayo, cuando los debutantes Toronto Raptors reciban a los actuales bicampeones Golden State Warriors en su casa. Estas series proveen una chance para muchos jugadores en ambos lados para confirmar, construir o crear sus legados en la NBA. Por eso, le preguntamos a nuestros expertos: ¿Quién tiene más para ganar con el título en estas Finales de la NBA 2019?
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Pablo Schatzky (@pchaski): Kawhi Leonard
Hace un año de este día, Kawhi Leonard todavía no era ni jugador de los Toronto Raptors. Todavía le quedaba una temporada de contrato con los San Antonio Spurs y él, enigmático como siempre, estaba oculto tras el drama vivido en su último año en Texas. Adelantemos hasta este jueves y Leonard jugará en las primeras Finales de NBA de la historia de Toronto Raptors.
Tras el traspaso por -hasta ese entonces- el Raptor más querido de su historia, DeMar DeRozan, muchos dudaban sobre su estado, tanto atlético como basquetbolístico. No solamente esos críticos estarán escondidos en este momento, sino que Leonard tiene frente a él la chance más grande de toda su carrera en convertirse, si destrona a los Warriors, en para muchos el mejor jugador activo de la NBA.
Nada mal para un jugador que este verano se transformará en agente libre y recibirá ofertas más que jugosas. Pero más allá de ello, su legado está en juego. Kawhi Leonard. MVP de las Finales en 2014, ___ ___ ___ en 2019. Si se llena con MVP de las Finales, estamos hablando de un jugador que quedará para siempre en la historia de la Liga.
Leandro Fernández (@FernandezLea): Stephen Curry
Nadie podrá cuestionar a un jugador que rompió el molde del básquet moderno y encabezó la revolución del deporte con su particular manera de jugar (y su fantástica capacidad para el triple, claro). Mucho menos si ese jugador es el líder de un equipo que ganó tres campeonatos en cuatro años. Pero si estuviéramos obligados a buscarle un lunar al camino de Stephen Curry, por más difícil que fuera esa tarea, quizás deberíamos poner la mirada en su producción en las Finales.
No, Steph no necesita un MVP en definiciones para certificar su grandeza. Pero sí, que bien le vendría que su versión estelar explote en la instancia máxima. Es cierto que Kevin Durant y su nivel galáctico en los últimos dos años magnifican aún más eso de que el base no rindió del todo bien en Finales (falso, claro). Pero es tan cierto como que en 2015 le costó descifrar el enigma Dellavedova (hasta la explosión de Iguodala), y que el colapso del 2016 tras estar 3-1 ante Cleveland lo mostró con una de sus peores caras en Playoffs.
Curry llega a estas Finales tras la mejor serie anotadora de su vida, mostrando un nivel que alimentó como pocas veces eso de que los Warriors son mejores (o lucen más) cuando él toma el mando por encima de KD. Y si bien el MVP no le va a cambiar nada mientras el título termine en su poder, nadie -al mismo tiempo- tiene más para ganar o demostrar que el armador de Golden State. Ganar, a fin de cuentas, tiene el mismo sabor. Pero agregarle un detalle como esa mención lo hará aún más especial.
Sergio Rabinal (@S_Rabinal): Stephen Curry
Mientras la lesión de Kevin Durant mantenga apartado de las canchas al mejor jugador de la NBA en la actualidad, tenemos que contentarnos con el más imprevisible y determinante. Stephen Curry ha recuperado su imagen de líder al mismo tiempo que volvía a dar muestras del jugador que condujo a los Warriors a sus picos históricos. Las Finales conforman un asterisco dentro de la carrera de Curry; ni en 2015, ni en 2016, ni en 2017, ni en 2018 fue capaz de marcar las diferencias y cumplir las expectativas.
No obstante, el propio perfil de Stephen y su personalidad le convierten en un jugador que no demanda brillar constantemente para ser determinante. Su visión como point guard moderno le permite mantener en pista un nivel óptimo dentro del sistema colectivo a pesar de no continuar con sus promedios abituales en anotación. Pero en esta ocasión esto puede ser diferente. Las muestras de estadística avanzada son muy pequeñas, ya que Curry solo se ha enfrentado una vez a los Raptors y solo le defendió VanVleet, y en los 5 enfrentamientos que han tenido desde que llegase KD, Curry promedia 25.4 puntos con promedios superiores al 50% en TC.
En todo su camino a las Finales, los Raptors no han tenido que enfrentarse a un equipo con un base peligroso y anotador como sí han hecho los Warriors en varias ocasiones. No tenemos precedente de qué puede ocurrir si Golden State comienza las Finales sin Durant, pero hay que tener claro que el Curry actual dista mucho de versiones anteriores. Más maduro, más certero y con el objetivo del cuarto anillo.
Carlos Herrera Luyando (@carhluy43): Kyle Lowry
La carrera del movedor de los Raptors no ha sido sencilla. Pero más de una década después vino la recompensa de la mano de Kawhi Leonard. Seamos honestos, DeMar DeRozan no hubiera logrado llevar a Toronto a las Finales como sí lo hizo Kawhi.
A pesar del enojo que el intercambio causó antes del inicio de la temporada, esa sonrisa de Lowry dijo muchas cosas. Y tiempo después deberá tener muchas ganas de demostrar sus habilidades cuando se bote la bola en una cancha finalista y con la adrenalina al cien. Kyle ha sido All-Star, sin embargo, en esta campaña estuvo lejos de competirle a los mejores guardias. Ahora, en las Finales, se enfrentará a, quizás, el mejor jugador en su posición.
Estoy seguro de que Lowry tiene mucho por ganar y esas críticas que han venido por su desempeño en los Playoffs pueden desaparecer si tiene una gran serie.
Matías Baldo (@matiasbaldo): Draymond Green
Dray es usualmente la estrella menos reconocida de estos Warriors. Kevin Durant, Steph Curry y hasta Klay Thompson acaparan más focos que él, pero la realidad es que Green probablemente haya sido el jugador más regular en la estructura de Steve Kerr durante estos playoffs. Ante el talento general, queda eclipsado y muchas veces encapsulado como un bravucón. Green cambió su mentalidad, enterró su faceta más verborrágica y se reencontró con su mejor versión.
“Llegué a un punto en el que pasaba más tiempo llorando que jugando. Estoy seguro que fue desagradable verlo porque yo sentí que era desagradable jugar de esa manera", reflexionó después del tercer partido frente a Portland Trail Blazers.
La dinastía de los Warriors no se explica sin Draymond y, justo cuando parecía haber ingresado en un declive en su carrera, tendrá la oportunidad de redondear una de las mejores actuaciones de su vida en postemporada. Frente a Toronto tendrá la oportunidad de brillar y silenciar definitivamente a todos y cada uno de los que menosprecian su impacto en el juego de los Warriors.