Finales NBA 2019: Serge Ibaka, el factor X de los Raptors en el triunfazo frente a los Warriors

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Solo cuatro arriba al descanso, esos minutos de tregua anticipaban lo que llegaría después. La calma que precede a la tormenta. Los 12 minutos favoritos de los Warriors para destruir. El cuarto por excelencia donde devastan al rival en cortos y muy poderosos parciales: los terceros cuartos. Todo apuntaba a inicio criminal para Golden State en la segunda parte. Nada de eso.

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Los Raptors supieron no solo aguantar, sino dejarse llevar por el ritmo del cuarto, adaptarse a la velocidad y meterle su propia intensidad. Así marcan un parcial extraordinario de 37-21 en el tercero, donde pasan por encima de los actuales campeones en ataque y defensa. ¿El nombre clave? Serge Ibaka.

Solo entre Kawhi Leonard (17) e Ibaka se combinaron para más puntos en el cuarto que los Warriors (24-21). Desde la consistencia defensiva y el ritmo atrás, hasta encontrar los triples abiertos en ataque. Todo ello con el toque de estrella habitual de Leonard y la irrupción de Ibaka.

"Solo quiero jugar al básquetbol. Quiero tener espacio para hacerlo. Kawhi y Kyle (Lowry) hicieron un gran trabajo encontrándome cortando al aro y en la pintura", comentó Serge.

"Pusimos mucho trabajo en esto y siempre creímos mucho en nosotros mismos. Marc (Gasol) y yo nos repartimos minutos y siempre intentamos estar listos para la acción", agregó post partido.

Su noche es sensacional. En el escenario más grande de la NBA y en un ritmo al que se podía adaptar mucho mejor que Marc Gasol, Serge brilló en un tiempo limitado: 20 puntos en 12 tiros en menos de 22 minutos de juego. Y con solo dos fallos desde el segundo cuarto.

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Ibaka, básico para ganar a los Warriors en su juego

Ibaka fue el factor diferencial en la guerra de los suplentes. En Playoffs es habitual que jugadores de rol aparezcan y cambien el signo de los partidos, más en rotaciones tan profundas como las de Toronto. Y hoy Serge es la diferencia entre ambos bancos. VanVleet, más apagado que otros días, y un recién recuperado Looney fueron su competencia.

Más allá de los números, que son espectaculares si se añaden los 4 rebotes, 2 tapones y una asistencia, la importancia de Ibaka en el tercer y cuarto cuartos reside en dos puntos. El primero de ellos es el ritmo que alcanzaron los Raptors. Golden State quiso romper el partido al abrirse la segunda mitad y no pudieron porque los canadienses supieron adaptarse y plantar un campo de batalla lleno de barro. Pero para nada fue algo lento y doloroso, sino acelerado y con la sensación de que se empezó jugando a lo que querían los de Oakland y que eso favoreció a Toronto. Sin Ibaka, imposible.

Y el segundo es el desparpajo anotador. Las líneas defensivas de Oakland cayeron con facilidad ante dos, tres pases de los visitantes. Ya fuese desde el triple, como tráiler o en media distancia, Ibaka encontró tiros, se atrevió y los anotó. La noche más efectiva de su carrera en una nueva oportunidad de oro que ganan los Raptors.

warriors raptors tercer cuarto

Durante toda la primera parte estuvieron por detrás en el marcador, pero supieron darle la vuelta. Lo mejor de Ibaka en el tercer cuarto es que aparece tan solo 4:30 minutos, aún así su producción es bestial: 7 puntos (3 de 3 en tiro, 1 de 1 en triples), 1 rebote y 1 tapón. En el tercer cuarto los Raptors registraron un +109,1 de Net Rating con Serge en pista. Un +24,4 por cada 100 posesiones en todo el partido, la mejor cifra del equipo con más de 11 minutos en pista.

Partidazo de Serge Ibaka y de los Toronto Raptors. Están siendo mejor equipo y adaptándose a lo que aparece en cada encuentro. Durísimos atrás y ordenados en ataque, con cada vez más confianza y tomando las decisiones adeucadas. E Ibaka es el reflejo de todo esto.

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