A un mes de la suspensión de la temporada 2019-2020 de la NBA, afectada como todo el mundo por la pandemia del coronavirus COVID-19, son bien claros los desafíos de los integrantes de la liga para mantener cierta normalidad en sus vidas mientras navegan la incertidumbre del regreso a la actividad. Con las instalaciones de los equipos cerradas para mitigar los efectos del virus, sostener la forma ha sido todo un tema para muchos.
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Gordon Hayward es uno de ellos. El alero de Boston Celtics dio una entrevista a Los Angeles Times, y contó algunos detalles de la nueva vida en medio de la suspensión y el aislamiento, sabiendo que el básquet es una cuestión que se ha complicado. De hecho, el ex Utah confesó que no ha lanzado al aro desde que se decretó la suspensión. "Tenemos un gimnasio pequeño en casa, así que estuve haciendo algunos ejercicios. Cuando los días están lindos, puedo salir a correr un rato y a hacer algunos ejercicios con pelota como si fuera un niño en la entrada de la cochera de mi casa", señaló.
"No tengo una cancha en mi hogar, así que no hay donde ir con las instalaciones del equipo cerradas. Estamos tratando de ver cómo atravesamos esto y cómo nos mantenemos preparados, pero al mismo tiempo manteniendo la distancia y los cuidados de salud", agregó.
Como pasa con casi todos, quedarse sin algo (en este caso, el básquet) permite a la vez ganar tiempo para otra cosa, como el mayor tiempo en familia en una época en donde, habitualmente, los jugadores se estarían preparando para los Playoffs. Claro que en el caso del de los Celtics, el tiempo también se usa para otra de sus pasiones: los videojuegos, todo un desafío con tres hijas en casa (y otro bebé en camino con su mujer embarazada). "Definitivamente están pasando muchas cosas en la casa de los Hayward. Si me vieron en streamings recientemente, es difícil poder jugar por acá. Me han invadido mis hijas un par de veces mientras jugaba. Creo que a la gente le gusta ver eso. Es genial que vengan, salvo cuando me hacen perder", bromeó.
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Los E-Sports son todo un tema para Hayward, quien invirtió en una organización de enfocada para celulares (Tribe Gaming). Y al mismo tiempo son una sensación de cierta normalidad en medio de la crisis para este fan del "League of Legends". "Todos estamos en cuarentena, pero la parte de los videojuegos es normal para alguien que juega habitualmente. Todos se mantienen jugando y podemos pasar un rato. Los videojuegos han sido instrumentales para mí como jugador NBA. Tenía 20 años cuando llegué a Utah, y no tenía amigos ni familia. Estaban mis compañeros, pero yo era el más joven y todos tenían familia, así que los videojuegos y el hecho de poder jugar a ellos con mis amigos era como poder salir con ellos", describió.
Al momento de la suspensión, Hayward estaba promediando 17,3 puntos, 6,5 rebotes y 4,1 asistencias en 45 partidos con los Celtics, que se ubicaban en el tercer lugar del Este con marca de 43-21.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.