El partido ante Boston de este martes dejó una noticia todavía peor que la derrota para los Golden State Warriors: la lesión de Kevon Looney, quien sufrió un esguince de tobillo. Y aunque todavía no hay precisiones sobre cuánto tiempo estará afuera de las canchas, Steve Kerr adelantó que se perderá los próximos encuentros.
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La baja de Looney es especialmente dolorosa porque deja a Golden State prácticamente sin jugadores interiores: los cuatro más altos que tienen en el plantel (Wiseman, Smailagic, Looney y Chriss) están afuera, por lo que de no mediar un fichaje (igualmente no lo tendrían automáticamente por los Protocolos de Salud y Seguridad), tendrán que afrontar los próximos compromisos con Draymond Green y Eric Paschall como sus referencias de pintura. Algo que por otro lado, Kerr ha estado tratando de evitar a toda costa durante la 2020-2021, escapándole a esas formaciones de small-ball y juntando siempre a Green con otro pivote. ¿El resultado? Los Warriors permiten el cuarto porcentaje en dobles más bajo del torneo y tienen la novena mejor defensa.
Sin esa posibilidad, Golden State tendrá que improvisar en su rotación. Y allí las alternativas son varias. La menos probable parece la de juntar a Green y Paschall como titulares, ya que dicha apuesta dejaría a la segunda unidad directamente sin ninguna opción de relevo interior. Además, al tratarse de jugadores con ciertas características similares, los Warriors rara vez los usan al mismo tiempo: solo 47 posesiones en esta campaña.
Otra alternativa pasa por incluir en el cuadro titular a alguno de los tres externos que suelen salir como suplentes: Brad Wanamaker, Damion Lee o Kent Bazemore, corriendo a Kelly Oubre como ala pivote. El encaje no sería malo con cualquiera de los tres, pero hay dos puntos en contra: para empezar, la salida de cualquiera de esos nombres limitaría aún más a un grupo de relevos con serios problemas ofensivos y por otro lado, sería apostar por formaciones chicas, perdiendo todo tipo de presencia física, centímetros y kilos. Y de nuevo, esa no ha sido la idea de Kerr en la 2020-2021.
Es allí donde nos encontramos con la opción que parece tener más lógica: la inclusión del mexicano Juan Toscano-Anderson en el quinteto titular. En su caso, su ingreso no estaría tocando al grupo habitual de la segunda unidad, ya que el alero solo ha visto minutos en ocho partidos en esta temporada. Y por otro lado, si bien también se trata de un perimetral, es bastante más alto que Wanamaker, Lee y Bazemore, a lo cual le agrega brazos largos, capacidad atlética y mucha intensidad defensiva. Si Golden State quiere mantener cierta competencia física entre sus titulares, Toscano es la alternativa que más sentido tiene, al menos de las que tienen hoy a su disposición.
De hecho, sus 1,4 tapas por cada 36 minutos son la tercer mejor marca del plantel, detrás de James Wiseman (2,2) y Andrew Wiggins (1,6).
El primer indicio al respecto ya apuntó a que la decisión de Kerr irá por ese camino. Toscano fue por lejos el suplente que más jugó en el duelo ante Boston (partido en el que se lesionó Looney), pasando 27 minutos en cancha, contra 17 de Bazemore, 15 de Lee, 14 de Paschall y 12 de Wanamaker, además de cerrar el encuentro en cancha junto a los otros iniciales del equipo.
Su respuesta ante la confianza del entrenador no pudo ser mejor: empató la máxima de puntos de su carrera NBA con 16, lanzando un 6-9 de cancha, un 3-3 en triples y un 1-1 en libres. Toscano sumó además 2 rebotes, 1 asistencia, 1 robo, 1 tapa y no perdió ningún balón. Su energía fue fundamental para que Golden State terminase el duelo a tiro de Boston, como también lo fue su eficacia desde el perímetro: el ex Marquette lleva ahora un 41,2% en triples durante los 21 partidos de su carrera.
Si bien es cierto que al tener contrato doble vía los Warriors tienen un límite de días para los que pueden utilizar a Toscano, no deberían tener problemas en usarlo al menos hasta que se recuperen Wiseman o Looney. Y por otro lado, si el mexicano responde, siempre está la posibilidad de transformar su contrato en uno fijo, para lo cual deberían realizar un corte (Mychal Mulder, sin contrato garantizado, probablemente sería el apuntado en ese caso).
Golden State inicia este jueves una seguidilla de cuatro partidos fuera de casa: esa noche visitan a Dallas, luego se vuelven a enfrentar a los Mavs el sábado, para más tarde chocar contra San Antonio tanto lunes como martes. Sea como titular o con un rol protagónico desde el banco, se viene una chance importante para Juan Toscano, que tranquilamente podría marcar una bisagra en su futuro en la liga. Estará en él aprovecharla, tal como lo hizo ante los Celtics.
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