"Greer va a poner el balón en juego. Busca un pase largo y ¡Havlicek lo intercepta!. La juega para Sam Jones.¡Havlicek robó el balón! ¡Se terminó todo! ¡Se terminó todo! ¡Johnny Havlicek es llevado en andas por los fanáticos! ¡Se terminó todo! ¡Havlicek robó el balón!."
Esas fueron las palabras del relator Johnny Most en los últimos segundos del séptimo partido de las Finales de la Conferencia Este de 1965, en lo que es uno de los relatos más míticos de la historia de la NBA.
La emoción no era para menos: Havlicek le había dado el pase a las Finales de la NBA a Boston Celtics, impidiendo que Philadelphia 76ers tenga su chance de quedarse con la serie en la última posesión.
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Hay muchas series que se terminaron con un tiro épico en el final, como la de Portland Trail Blazers y Oklahoma City Thunder que definió Damian Lillard en 2019, pero, ¿una final de conferencia definidas por un robo? Definitivamente es algo más raro.
Además el contexto implicaba algo realmente grande. Boston Celtics llevaba seis años consecutivos consagrándose campeón de la NBA y ocho temporadas seguidas como representante de la Conferencia Este en las Finales de la liga, negándole el paso a otras ciudades como New York y Philadelphia.
Havlicek, drafteado por Boston en 1962, se convirtió rápidamente en pieza clave del equipo tras decidir que prefería jugar en la NBA que en los Cleveland Browns de la NFL, donde lo habían drafteado para jugar como receptor. Sus cualidades para volar por el aire y atajar la pelota justamente fueron las que le permitieron interceptar el pase de Hal Greer en ese partido de 1965, después de que el hombre de los Sixers quede obligado a intentar una asistencia arriesgada.
Así, "Hondo" aseguró el pase de los de Red Auerbach a unas Finales más, en la que se consagrarían campeones por séptima vez en fila al superar a Los Angeles Lakers por 4-1. Ese séptimo juego, en el que Havlicek se destacó con 26 puntos y 11 rebotes, fue la sexta ocasión en la que los Celtics ganaron un séptimo partido de forma consecutiva en lo que fue su racha de ocho títulos seguidos (luego también vencerían a los Lakers en el séptimo juego de las Finales de 1966).
El equipo liderado por Bill Russell, siempre con ventaja de localía en el Boston Garden, era imbatible en su casa cuando ya no había vuelta atrás, jugando con un ambiente impresionante como ya no hay en la NBA.
Havlicek, una verdadera leyenda celta
Havlicek, que falleció en abril de 2019 y este 8 de abril de 2020 cumpliría 80 años, siguió ganando muchos más títulos. Retirado en 1978, fue el último jugador en retirarse de los históricos Celtics que dominaron la década del 60, pero también se consagró en 1974 (fue el MVP de las Finales a los 34 años) y en 1976 teniendo como entrenador a Tommy Heinsohn, compañero suyo en aquel partido ganado a los Sixers en el 65.
Con 26.395 puntos anotados a lo largo de 1.270 partidos de temporada regular, "Hondo" todavía está entre los 20 máximos anotadores de la NBA (ocupa el puesto 16, entre Paul Pierce y Carmelo Anthony) y es dueño de varios récords históricos de los Celtics. Havlicek lidera a la franquicia verde y blanca en partidos, minutos, lanzamientos anotados e intentados, dobles anotados e intentados, faltas personales y puntos. Otras leyendas del equipo, como Paul Pierce y Larry Bird, no pudieron acercarse ni a 2.000 tantos de lo convertido por Havlicek en temporada regular.
Por todo eso, la camiseta 17 del 13 veces All-Star y 11 veces All-NBA fue retirada inmediatamente al retirarse. Además, los Celtics también tienen sobre su parquet el banner de un micrófono en homenaje a Johnny Most, el relator de aquella icónica jugada, que trabajó junto a la franquicia hasta 1990.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.