Lonzo Ball está ansioso por comenzar la temporada con su nuevo equipo, New Orleans Pelicans, y está preparado para compartir cancha con Zion Williamson.
En declaraciones a ESPN, el ex base de los Lakers comentó que se enteró de que había sido traspasado cuando estaba en el auto yendo a ver a su hermano LaMelo jugar al básquetbol.
“Mi primera reacción fue emocionarme. Yo sabía que alguien sería traspasado porque Anthony Davis quería venir a Los Angeles. Cada vez que se puede conseguir a un jugador como él, se hace lo que sea necesario. Así que ya lo estaba esperando, para ser honesto”, aclaró sobre aquel día que se conocieron los detalles de la transacción. “Estoy feliz de ir con dos tipos con los que me siento cómodo como Brandon Ingram y Josh Hart”.
Sobre Zion, Lonzo dijo que nunca vio algo igual en su vida. “Nunca vi a alguien de ese tamaño moverse así. Tiene solamente 19 años y es un freak, realmente sin igual”.
Lonzo sabe que con Zion podrán tener un juego rápido, corriendo la cancha y armando pick and rolls. “Será muy difícil pararlo. Tenemos que salir en transición lo antes posible”.
El base de los Pelicans sabe que todavía no tiene el alta médica, que espera que suceda en las próximas dos semanas. La lesión en la rodilla lo detuvo en 52 partidos en sus primeras dos temporadas y aún no mostró todo el potencial basquetbolístico que posee.
Antes de lesionarse el tobillo izquierdo frente a Houston, Ball estaba promediando 11,1 puntos, 7,0 asistencias y 6,1 rebotes en enero.
“Solo estuvo en la NBA dos años y quiero tener un nuevo comienzo en New Orleans para mostrarle a la gente lo que soy capaz de hacer”.