Después de una jornada sin acción, este martes vuelven los Playoffs con un partido clave en las Finales de la Conferencia Oeste entre Los Angeles Lakers y Denver Nuggets. Es que este tercer capítulo, que será a las 20 de México, 22 de Argentina y tendrá transmisión exclusiva en español a través de NBA League Pass, con Quique Garay y Fabricio Oberto (en Argentina también se verá por DirecTV Sports), puede ser decisivo para cualquiera de los dos ante la posibilidad de ese 3-0 (o 0-3, dependiendo desde qué lado se mire) que resulta implacable, ya que ningún equipo en la historia de la postemporada dejó pasar esa ventaja.
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Eso buscarán los Lakers ante estos Nuggets de los milagros en estos Playoffs, donde ya remontaron dos veces un 1-3, tanto en Primera Ronda como en Semifinales de Conferencia. Claro que evitar ese 0-3 sería elemental, no sólo por el peso histórico de ese tipo de resultados sino también por el factor diferente que tiene esta eliminatoria respecto a las dos anteriores. ¿Qué podemos esperar de este encuentro? Vamos con tres historias a seguir.
El factor anímico y el resto de los Nuggets
Está claro que Denver es un equipo completamente resiliente y que descartarlos antes de tiempo ya no es una opción. Lo demostraron ante Utah en la Primera Ronda y lo repitieron una instancia después ante los Clippers. El tema, claro está, son los contextos. Por más capacidad de lucha y determinación para evitar la derrota que tengan los Nuggets, los Lakers son un monstruo completamente diferente al Jazz y los Clippers, uno que tiene -como punto de partida- a un tal LeBron James.
Los de Mike Malone intentarán remontar, está claro. Pero habrá que ver cómo juega la forma de la derrota en el Juego 2, un partido que tuvo todo el olor a ese tipo de duelo crucial, donde un equipo se puede meter de lleno en la serie. Porque los de Colorado se habían recuperado de una desventaja de doble dígito, tenían controlado a un LeBron errático, habían hecho un esfuerzo notable para ponerse en ventaja en el clutch... Pero Anthony Davis borró todo en dos segundos, de la manera más dolorosa posible para alguien que hizo semejante desgaste.
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— NBA Latam (@NBALatam) September 21, 2020
"No importa si es por 20 de diferencia o sobre la bocina, la derrota cuenta de la misma manera", señaló el entrenador tratando de quitarle peso al golpe sobre la hora y buscando poner la mira hacia adelante para otra recuperación. "Somos un grupo que odia perder. Y algo que sé de este grupo es que más allá de estar desilusionados, frustrados y enojados, usaremos eso de motivación para tratar de ganar el próximo partido. No importa si estamos 2-0, 2-1... El siguiente partido siempre es el más importante. Esa fue nuestra mentalidad en la Primera Ronda y en la Segunda. Estamos en la misma situación", agregó.
Desde el discurso, está claro que Denver hará el intento. Pero es válida otra pregunta: ¿cuánto resto les queda en el tanque? Hay un dato muy claro para empezar: los Nuggets han jugado casi 200 minutos más que los Lakers en estos Playoffs (773 contra 576). Y a esa carga lógica sobre el físico de sus integrantes hay que sumarle el desgaste emocional, porque remontar dos 1-3 requiere muchísimo también desde la cabeza. Al cabo, para Denver fueron un total de seis partidos con chance de eliminación, en donde la presión le puso otro peso a cada cuerpo. Veremos cuánto más tienen por dar estos resilientes Nuggets.
Denver y la imperiosa necesidad de su defensa
Más allá de la maravillosa magia de Nikola Jokic o las ráfagas indetenibles de Jamal Murray, el termómetro de Denver en estos Playoffs ha sido su defensa. Cuando estuvo presente, cuando fue realmente intensa y concentrada, los Nuggets tuvieron sus mejores pasajes de juego, porque ese poder desde atrás alimentó y potenció la confianza y ejecución adelante. De hecho, Denver se dio una chance de ganar el J2 en gran parte por su defensa, que dejó a los Lakers en 40% de campo en el segundo tiempo. Es más, si sacamos a Anthony Davis del medio, los de Colorado le permitieron apenas 23 puntos y 8-27 de campo al resto de sus rivales.
Lo concreto es que Denver ha sumado 8 triunfos y 8 derrotas en estos Playoffs, y está claro que en los partidos en que se quedó con el festejo hubo una mejora defensiva notable en relación a sus caídas. "En las ocho victorias nuestras defensa fue grandiosa", ponderó Malone.
| Situación | Puntos | %TC | %T3 | Pérdidas | Rating Def Denver |
|---|---|---|---|---|---|
| En victorias de Denver | 101,3 | 42,8% | 35,5% | 13,6 | 106,4 |
| En derrotas de Denver | 117,1 | 51,4% | 41,2% | 13,5 | 122,6 |
Un factor que supo mejorar Denver entre los dos partidos fue su defensa en transición. Los Lakers habían anotado 16 puntos de ataque rápido en el Juego 1, pero en el segundo apenas metieron 8. "Si lo podemos mantener, nos daremos una chance", resaltó el coach sobre contener la transición angelina.
El tema a resolver, de todas maneras, sigue siendo cómo contener a Anthony Davis, quien promedió 34 puntos, 52,3% campo, 43% triples (3,5 intentos), 11 intentos de libres (86,4% acierto) y 9,5 rebotes en los dos primeros encuentros. Es más, en la segunda mitad del J2 sumó casi lo mismo que todos sus compañeros (22 unidades y 8-13 campo). Veremos si Denver realiza algún tipo de propuesta diferente para tratar de sacar a AD de la comodidad que parece tener en este duelo.
LeBron y el efecto de los 2-0
Está claro que los Lakers están con una ventaja cómoda, desde los resultados y el juego. Sus estrellas están brillando a la altura y, sobre todo, sus complementos siguen dando un paso al frente que potencia por completo la estructura colectiva. Frank Vogel tiene muchos motivos para sentirse conforme con lo que están mostrando los Lakers. Pero si hiciera falta alguno más, basta con ver los antecedentes de LeBron James para confirmar la buena posición angelina...
Esta es la 23° oportunidad en la carrera del Rey que sus equipos comienzan una serie de Playoffs con ventaja de 2-0. ¿Cómo le fue en las 22 previas? Ganó todas y cada una de ellas. Es más, más de la mitad (12) terminaron en barrida. De las 10 restantes, sólo tres llegaron hasta el sexto partido y apenas una se definió en el séptimo. Es decir que los Nuggets no sólo tendrán que encarar una remontada por demás compleja, sino que tendrán que forzar una situación que jamás se le dio a James. ¿Veremos historia?
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