La pasión y el amor por Manu Ginóbili no conoce de límites. Y después de su retiro, claro, llegó la hora de pasar a la leyenda y expresar el agradecimiento de varias maneras. Y el propio bahiense vivió en carne propia una de ellas. Este viernes, Ginóbili pasó por "La Copita", una conocida y tradicional cancha del barrio porteño de Saavedra, en Buenos Aires, en donde se pintó un enorme mural suyo en el piso a modo de homenaje.
Temprano en la mañana, curiosos y ajenos comenzaron a juntarse porque se rumoreaba de que algo pasaría en la histórica canchita de Saavedra, que queda en el medio de una zona de casas, tranquila y silenciosa, más en un día laboral y con tanto calor en la Ciudad de Buenos Aires. Una semana atrás, Nike, sponsor oficial de Manu Ginóbili, había terminado de pintar el mural en manos del artista Rodrigo Ojeda.
Sobre "La Copita"
La Copita es más que una simple cancha de básquet: es un lugar de reunión para decenas de chicos y chicas que usan al deporte como excusa para reunirse y pasar un buen rato entre amigos. Es probablemente la cancha con mayor sentido de pertenencia de la Capital, ya que es común que los domingos las familias del barrio saquen sus reposeras y tomen mate mientras en el rectángulo se lleven a cabo partidos tras partidos hasta bien entrada la noche, porque también cuenta con iluminación.
Un poco más de la visita de @manuginobili a La Copita. pic.twitter.com/VnXgV941d5
— Pablito🇸🇪 (@pchaski) December 28, 2018
Por eso, cuando Manu Ginóbili pisó por primera vez La Copita, hubo algunos vecinos que se emocionaron al recibirlo. "Esta canchita es del año '47", le recordaron. "Mirá qué bien se conserva", respondió Manu. Y en esa conservación, como la máxima leyenda del básquetbol argentino resalta, está el gran aporte de quienes aman la canchita, uno de los íconos del barrio. Hace unos meses, vecinos y amigos se movilizaron para organizar un campeonato de 3 x 3 para juntar plata y así poder restaurarla. El resultado fue mejor de lo esperado: lograron cambiar los tableros y aros y conseguir pintura para la cancha.
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Pero luego llegó la sorpresa: Nike comenzó a preparar el mural en el piso y con los vecinos y jugadores se pusieron de acuerdo para dejar los aros que la comunidad había conseguido. Luego de que se viralizara la foto de la canchita con la imagen del 20 de los Spurs retirándose al túnel en su último partido frente a Golden State Warriors en los playoffs de 2018, llegó el momento de que el bahiense la conociera en primera persona.
La Copita, con Manu de fondo. Foto cortesía de Miguel Cuellar.
Manu quedó sorprendido por la gigantografía suya con la camiseta de los Spurs. Primero posó solo para la campaña de Nike, pero luego pidió ser acompañado por sus hijos. También, claro, dejó su firma estampada al lado de ella, algo que quedará inmortalizado. "Quedó muy linda la cancha. Los felicito", dijo Ginóbili antes de terminar con una broma: "Ahora que la firmé, la cancha no se puede usar más".
Para quienes van todos los días, haber recibido al mejor argentino de todos los tiempos no fue poca cosa. "Que Manu haya pisado esta cancha, confirma lo que todos sentimos por La Copa. No se eligió cualquier cancha ni cualquier plaza. Eligieron esta", comentó Tomás, un habitué de la cancha ubicada en Valdenegro y García del Río.
Ginóbili eligió no seguir siendo un basquetbolista profesional a sus 41 años, pero su legado es inmenso. Lentamente, la Ciudad, los vecinos y todos aquellos amantes de este deporte comienzan a homenajearlo a su manera.
