El juego de las diferencias: Milwaukee Bucks y los tres cambios que marcan su presente

Author Photo
Giannis

La consistencia y la continuidad son dos de las principales virtudes que hacen de los Milwaukee Bucks uno de los mejores equipos de la 2019-2020. Eso y tener a una bestia como Giannis Antetokounmpo en sus filas, claro está. Su marca de 17 victorias y 3 caídas habla por si misma, como también lo hace su racha de 11 triunfos de manera consecutiva. Los Bucks saben a lo que juegan desde hace mucho tiempo y cada día son más eficaces con esa identidad.

Más | La Carrera por el MVP de la NBA 2019-2020: los mejores de noviembre

En la superficie, los de Budenholzer mantienen casi todas las características de la campaña anterior: la producción triplera, la gran eficacia en situaciones de definición, la protección del aro, la profundidad de la banca... la lista es realmente muy larga. Solo basta con comparar estadísticas y rankings de un torneo al otro para descubrir las múltiples similitudes. 

Pero ¿qué pasa si no nos conformamos con lo superficial y comenzamos a cavar más profundo?, ¿encontramos allí diferencias significativas con los Bucks de la temporada pasada? La respuesta la tenemos a continuación: tres detalles escondidos, que a la larga, pueden marcar el rumbo del equipo en el certamen

Aprovecha el Black Friday y suscríbete al NBA League Pass con un gran descuento

Un Giannis triplero

#Giannis

El cambio más notorio tiene que ver con la máxima figura del equipo, Giannis Antetokounmpo, quien parece haberse tomado en serio lo de no conformarse con el MVP de la 2018-2019. Sus números son superiores en todas las categorías, con un promedio de 30,9 puntos y 13,4 rebotes que de mantenerlos, lo tendrán entre los máximos favoritos a repetir como el más valioso del certamen. De todas formas, hay un aspecto específico donde el ala pivote ha dado un claro salto adelante: el tiro externo.

En términos de porcentajes, Giannis no ha mejorado demasiado: 26% en triples en la 2018-2019, comparado con un 29% en la actual campaña. Sin embargo, si hablamos de intentos, la transformación es notoria. Antetokounmpo promedió 2,8 triples por partido en la campaña anterior. ¿En esta? 4,9. La leve suba de porcentaje, sumado al mayor número de lanzamientos, le permite estar anotando exactamente el doble por juego: 1,4 conversiones vs 0,7.

Más allá de que lógicamente sigue sin ser un gran tirador, el transformarse en una cierta amenaza desde el perímetro resulta fundamental para Giannis. Las defensas tienen que jugar un paso más cerca y normalmente eso es todo lo que necesita para penetrar y llegar hasta el aro sin problemas. Un mayor caudal de tiros externos se refleja en un mejor spacing para los Bucks, con mayores espacios para Antetokounmpo y sus compañeros. 

Más | Giannis Antetokounmpo sigue metiendo triples para Milwaukee Bucks y asusta al resto de la NBA

Cuando lleguen los playoffs, allí podría radicar la diferencia con respecto al frustrante final de la última temporada: Milwaukee precisará a su figura anotando desde el perímetro, para contrarrestar los muros defensivos que le pueden proponer equipos como Toronto, Philadelphia o en menor medida, Boston y Miami.

Distribución de tiros

Donte DiVincenzo

Otro cambio claro entre el Milwaukee pasado y presente tiene que ver con la distribución de tiros. Veamos cómo se da la misma, entre los cinco jugadores de mayor protagonismo en ambos equipos.

Los 5 protagonistas de Milwaukee: 18-19 vs 19-20
Jugador Tiros Jugador Tiros
Giannis Antetokounmpo 17,3 Giannis Antetokounmpo 20,6
Khris Middleton 14,9 Khris Middleton 13,5
Eric Bledsoe 12,4 Eric Bledsoe 12,8
Malcolm Brogdon 11,7 Brook Lopez 8,8
Brook Lopez 9,7 Donte DiVincenzo 7,6

Sea buscado o circunstancial, lo cierto es que Antetokounmpo está acaparando un mayor protagonismo ofensivo que en la temporada pasada, tomando más de 3 lanzamientos por encima de su promedio anterior. El resto se ha mantenido (Bledsoe) o bajado sus intentos (Middleton y Lopez).

De todas maneras, el mayor contraste aparece en la posición del escolta: en la 2018-2019, Brogdon tomaba casi 12 tiros por partido. ¿Su reemplazo para la actual? Apenas 6,4 en manos de Wesley Matthews. De hecho, DiVincenzo está teniendo un promedio superior de disparos (7,6), a pesar de jugar apenas 21 minutos por encuentro. Los Bucks tenían en Brogdon a un jugador integral. Muy lejos de lo que aporta un especialista en el 3&D como Matthews.

La conclusión es que Milwaukee poseía en la 2018-2019 cuatro opciones ofensivas claras: Antetokounmpo, Middleton, Bledsoe y Brogdon, todos tomando más de 10 tiros por partido. Mientras que en la 2019-2020 el ataque corre por cuenta de básicamente tres manos. Por ahora, no lo están pagando en la Fase Regular, pero la falta de esa cuarta alternativa podría jugarles en contra en la postemporada, especialmente teniendo en cuenta los fantasmas que acarrea Bledsoe en esa etapa de definición.

La línea

#Giannis

El último aspecto en el que Milwaukee realmente se muestra como otro equipo es en los tiros libres. Con cuestiones a favor y otras en contra. Empecemos por las buenas. Los Bucks están llegando a la línea con mayor frecuencia que en la 2018-2019: sus intentos han subido de 23,2 a 25,9, pasando de la 15° posición del torneo a un excelente 6° lugar. Las estadísticas avanzadas también confirman la mejoría: pasaron de tomar un libre por cada 3,93 lanzamientos de cancha (17°), a uno cada 3,54 disparos en la 2019-2020 (8°).

El problema es que una vez que llegan allí, han perdido todo tipo de eficacia. Su 77% los dejó en un correcto 14° lugar en la 2018-2019. Pero esa cifra ha bajado a un 71° en esta campaña y se ubican anteúltimos entre los 30 conjuntos de la competencia. Solamente los Knicks y su espantoso 67% lanzan peor que ellos en esa área.

El bajón tiene nombre y apellido: Giannis Antetokounmpo. Así como el griego es fundamental para el éxito del equipo en casi todos los aspectos, también lo es en relación a la producción desde la línea. El MVP reinante está peleado con los libres y ha pasado de un aceptable 73% a un preocupante 59%. El temor principal es que le suceda algo similar de lo que le pasó a otras estrellas de la competencia, como Russell Westbrook y LeBron James, quienes una vez que entraron en un pozo psicológico con los simples, ya no pudieron salir de él.

En las gigantescas manos de Antetokounmpo está la fortuna de Milwaukee en esta temporada. Pero así como hemos detallado su progreso perimetral, su retroceso con los libres no deja de ser una señal de alarma de cara a los playoffs. Es allí donde cada punto vale oro y puede terminar marcando la diferencia entre el anillo y una temprana vuelta a casa.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.