Por más que la Navidad haya dejado una enorme victoria en la casa de Golden State, los Lakers terminaron preocupados por la lesión de LeBron James, quien tuvo que abandonar el encuentro ante el bicampeón en el tercer cuarto por una distensión en la ingle de la pierna izquierda. Claro que, antes de los estudios para determinar el grado del problema (este miércoles), el propio James dejó tranquilidad.
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"Lo bueno es que el músculo está intacto", le dijo el Rey a Dve McMenamin, de ESPN. "Nunca estoy muy preocupado por mis lesiones. Pude salir caminando por mi propia cuenta. Sentí como un tirón y traté de estirar un poco para poder recuperarme, pero no pude", agregó sobre el momento de la lesión.
LeBron James does it all in the 1st half, posting 17 PTS, 10 REB, 5 AST for the @Lakers! #NBAXmas #LakeShow
— NBA (@NBA) 26 de diciembre de 2018
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A la espera de los estudios, lo importante para Los Angeles pasa por saber si su estrella se perderá partidos o no. "La verdad es que no lo sé. Veremos qué arroja la resonancia magnética y cómo me siento el resto del día. Estaré recuperándome en todo momento. Y luego veremos cómo me siento cuando vayamos a Sacramento", señaló LeBron, dejando en claro que todavía no piensa en estar afuera del próximo encuentro ante los Kings, el jueves.
"Espero que no sea algo que demande mucho tiempo para poder volver a la cancha lo más pronto posible", cerró James, quien antes de abandonar el juego ante los Warriors llevaba 17 puntos, 13 rebotes y 5 asistencias.