NBA Draft 2020: ¿Cómo juega Jaden McDaniels? Perfil y scouting del talentoso alero

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McDaniels

Con la temporada de la NCAA finalizada abruptamente, debido a la expansión del Coronavirus, los mejores prospectos del baloncesto universitario empiezan a declararse elegibles para el Draft 2020 de la NBA. Ahora le llegó el turno de nuestro análisis a Jaden McDaniels, alero surgido de la Universidad de Washington.

¿Quién es y cómo juega McDaniels? Lo analizamos a continuación.

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Información personal

Jaden McDaniels es un alero de 2,06 metros de estatura y 91 kilogramos, nacido el 29 de septiembre del 2000. Hermano menor del actual jugador de los Hornets, Jalen McDaniels, Jaden supo brillar en la Federal Way Highschool de Washington, consolidándose como uno de los mejores proyectos de todo el país. Eso lo llevó a participar del McDonald's All-American y del Jordan Brand Classic, siendo rankeado por ESPN como el séptimo mejor jugador de la clase 2019. 

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Su única temporada en la NCAA fue una decepcionante campaña con los Washington Huskies, en la que terminaron con marca de 15-17. Los números de McDaniels no fueron malos, pero estuvieron lejos de lo esperado: 13 puntos, 5,8 rebotes, 2,1 asistencias, un 40% de campo y un 34% en triples durante 31 juegos (31,1 minutos por presentación). Su irregularidad lo llevó a salir desde el banco en 10 de los últimos 12 encuentros del calendario.

Fortalezas

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Lo principal que llevaba a McDaniels a ser considerado un proyecto de élite es su combinación de altura, buena capacidad atlética y habilidad perimetral. Aunque debe fortalecer su cuerpo, se trata de un jugador extremadamente fluido para su estatura y con muy buena rapidez.

McDaniels disfruta de un nivel técnico alto y tiene el manejo de balón de un jugador de 1,95. Si bien su presente es más bajo que el de varios otros candidatos del Draft, tiene un techo alto, gracias a sus virtudes naturales y diferentes recursos anotadores. De hecho, en un equipo muy limitado ofensivamente como los Huskies (ofensiva rankeada 112°), era normal verlo operar en situaciones de aclarados y uno contra uno.

McDaniels tiene un buen lanzamiento desde el drible y basa una gran parte de su juego en la media distancia. El 42% de sus disparos fueron dobles fuera de la pintura y anotó un correcto 39% de ellos. De nuevo, sus condiciones son las clásicas de un escolta.

Su 34% en triples es irregular, pero lanzó con mucha frecuencia desde allí (5,3 intentos por 40 minutos). Su bajo porcentaje estuvo influido por el hecho de haber tomado muchos triples desde el drible, pero cuando lo hizo a pie firme, fue bastante más efectivo.

Saca sus lanzamientos sin problema por encima de los defensores y ocasionalmente muestra destellos de ser una amenaza a la hora de generar mismatches.

Defensivamente es algo difícil juzgar a McDaniels, ya que Washington defendía normalmente en zona. Sin embargo, tiene algunas buenas herramientas para ese costado y se notaron especialmente en su habilidad para cerrar tiros perimetrales. Con su altura, brazos largos y velocidad, cubre mucho terreno en poco tiempo.

Sólido rebotero y entregó 1,8 tapas por cada 40 minutos.

Debilidades

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Más allá de su innegable talento, McDaniels debe cambiar mucho para tener éxito en la NBA. Lo primero pasa por fortalecerse físicamente. Apenas supera los 90 kilos y su juego es acorde a ello: es superado en defensa por rivales más fuertes y en ataque tiene muchos problemas para definir cerca del aro (56% de acuerdo a Hoop-Math).

La selección de tiro del alero tampoco es buena. Si bien es un lanzamiento que puede anotar con frecuencia, abusa de los dobles largos y de los tiros desde el drible. Debe ser más agresivo para atacar el aro y aprovechar sus centímetros: solo el 20% de sus disparos llegaron en la pintura.

Un problema a la hora de proyectar a McDaniels a la NBA es que deberá jugar con un rol muy diferente al que ha tenido hasta hoy en su carrera. Acostumbrado a tener el balón en sus manos (26% de uso en Washington), en el profesionalismo seguramente tendrá una función más limitada. Y en ella, se ha mostrado poco efectivo.

Esta acción es un ejemplo de los interrogantes que hay sobre su habilidad para cumplir con un rol complementario: no solo no aprovecha el espacio para tomar un triple a pie firme, sino que luego realiza un muy mal pase de entrada para su compañero

McDaniels no tuvo un mal promedio de asistencias en Washington (2,7 por 40 minutos), pero perdió el balón a un ritmo altísimo: 20% de sus posesiones. Es un jugador descuidado, con una toma de decisiones muchas veces cuestionable.

A la larga, lo que seguramente definirá su éxito en la liga pasa por su consistencia como tirador. Su 34% no es la mejor primera señal al respecto, pero de nuevo, podría mejorarlo si es más decidido a la hora de recibir y tirar, sin la necesidad de poner la bola en el piso. Hay chances de que corrija esa parte de su juego con el trabajo de los entrenadores NBA.

Posición de Draft proyectada: Final 1° Ronda | Comienzo 2° Ronda.

Comparación NBA: Jalen McDaniels, un Jeremy Lamb de 2,06 metros.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.