NBA Playoffs 2019: Portland Trail Blazers, la gran sorpresa del año

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Damian Lillard and CJ McCollum

Y se terminó la temporada nomás para Portland. Golden State Warriors los barrió en su casa luego de que los Blazers alcanzaran las Finales de Conferencia por primera vez desde el año 2000. Un equipo que se fue ovacionado del Moda Center y que se ganó cada uno de esos aplausos por ser la máxima sorpresa en estos Playoffs, ya que cuando Jusuf Nurkic se rompió la pierna en uno de los últimos partidos de la temporada regular, muchos en el Mundo NBA daban a Portland como descartado. En algo tenían razón aquellos ‘detractores’: el bosnio de 24 años estaba haciendo la mejor temporada de su carrera antes de sufrir la terrible lesión frente a Brooklyn Nets. Pero lo que destacaron cada uno de sus personajes principales se unió en una sola palabra: grupo.

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A pesar de haber transitado una temporada turbulenta (más allá de las lesiones importantes de Nurkic y CJ McCollum, el dueño Paul Allen falleció en octubre de 2018 y un asistente sufrió un accidente de auto) el grupo se mantuvo más unido que nunca y no solamente entró a Playoffs, sino que superó en primera ronda a un mejor posicionado (y favorable en las apuestas) Oklahoma City Thunder y venció en un Juego 7 de visitante a Denver Nuggets, el segundo mejor equipo del Oeste.

Damian Lillard

Damian Lillard

Más allá de que la defensa de los Warriors lo haya agotado con sus trampas y doble marcajes, Damian Lillard no tuvo la misma energía que en las primeras dos rondas ya que admitió haber sufrido una lesión en su costilla. “No lo usaré de excusa”, dijo el base. Y es el testamento que deja esta Lillard en estos Playoffs: el callar y jugar para demostrarle a todos que es el segundo mejor armador de la Conferencia Oeste y una de las máximas estrellas de la NBA.

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Su tiro para eliminar a Oklahoma City Thunder en la primera ronda de Playoffs se convirtió en un clásico instantáneo y probablemente en uno de los tiros más espectaculares no del año, sino de la historia de la NBA. El contexto lo agranda aún más: Russell Westbrook se había convertido en su némesis y Lillard había preferido no responder verbalmente a las cargadas y provocaciones por parte de varios jugadores de OKC. Tras el tiro, su última respuesta fue el ya famoso saludo para despedirlos del Moda Center en Portland. A lo largo de esa épica serie, Lillard promedió 33,0 puntos, 4,4 rebotes, y 6,0 asistencias con un -atención- 48% desde la línea de triples.


 

A pesar de que en las Semifinales contra Denver Nuggets bajó considerablemente su producción y fue su compañero CJ McCollum quien se vistió de héroe (ahora hablaremos sobre él), estos Playoffs quedarán forjados en la memoria de todos como la confirmación de Damian Lillard como líder indiscutido de una franquicia que, sin patear el tablero y con los “mismos de siempre”, se ha metido seis veces consecutivas entre los mejores de la NBA. Sin lugar a dudas, Damian Lillard es uno de los grandes ganadores de estos Playoffs.

"Fue una serie especial para nosotros. Veníamos de ser barridos en las dos primeras rondas consecutivas… así que mejor ser barrido en las Finales de Conferencia”, bromeó Lillard ni bien finalizada la temporada. “Hicimos un gran año. Perdimos a nuestro dueño, a Nurkic, a CJ en un momento crucial y aún así respondimos siempre. Este grupo confía en el compañero y somos reales. Todos los equipos querían estar donde nosotros estábamos”, añadió. 

Con respecto a su balance, Lillard aseguró que tuvo unos “grandes Playoffs”.

“Me fue muy bien en la primera ronda. Por cómo me desempeñé, en la segunda ronda me marcaron de manera más física. Aún así pude ser productivo. Y en la última serie, los detalles ya son mucho más agudos. Los Warriors me tiraron muchos cuerpos encima y me defendieron muy bien. Esto es lo más lejos que hemos llegado y considero que fue muy productivo”.

CJ McCollum 

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Todo superhéroe necesita un ladero. Una persona en la que depositan toda su confianza, que lo acompaña en los momentos más difíciles y que, de vez en cuando, debe tomar el mando de una situación desfavorable. Así tal cual se podría explicar lo de McCollum en esta postemporada. 

En Semifinales, cuando se cruzaron con Denver, el segundo clasificado de la Conferencia Oeste, fue CJ quien se calzó el traje principal para saltar en defensa de su compañero. El escolta fue quien más minutos promedió en una serie que se estiró a siete partidos y fue también el líder en puntos, con 26,4 por partido (acompañados de 6,0 rebotes y 45% desde el campo). Su actuación en el Juego 7, el partido más importante desde que alcanzaron las Finales de Conferencia en el 2000, fue consagratoria: 37 puntos y 9 rebotes para dejar atrás a unos Nuggets cuando Lillard apenas anotó tres canastas en todo el partido.


 

El escolta batalló con una lesión que lo marginó de 11 partidos en la temporada, pero pudo disputar los 16 encuentros de Playoffs, promediando casi 25 puntos por partido. 

"Mejoramos mucho como equipo", declaró McCollum. Es que Portland continúa apostando a la base de siempre, y parece estar en el camino correcto. Para Steve Kerr, entrenador de Golden State Warriors, este es uno de los equipos más increíbles para ver. "Esta versión de los Blazers se ha convertido en una de mis preferidas. Dame y CJ son increíbles y han formado un gran grupo", dijo Kerr.

Y eso es lo que todos pudimos observar en esta postemporada: la consumación de que la resiliencia da sus frutos y de que con un grupo unido, cualquier lesión se sobrepone.

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