Hasta el momento en el que comenzó el segundo partido de la serie entre LA Clippers y Denver Nuggets nada hacía presagiar que iba a presenciarse una de las noches más aciagas de la carrera de Kawhi Leonard en los Playoffs.
Y es que el alero californiano firmó un partido desde el tiro para el olvido con un 4-17 en tiros de campo, incluyendo un 0-3 en triples para finalizar con 13 puntos. En otras palabras, anotó el 23% de sus intentos y solo le salvó la línea de tiros libres, sumando 5-7 intentos. De este modo los Nuggets pusieron fin a la racha de Kawhi que encadenaba 18 partidos anotando 20 o más puntos.
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"Hay que darle crédito a los Nuggets", dijo Leonard tras el partido. "Salieron muy agresivos en ambos extremos esta noche".
Tan solo en tres ocasiones previas Leonard había terminado por debajo del 25% de acierto en tiros de campo, las dos primeras en 2012 y 2014 con San Antonio Spurs con apenas relevancia en el sistema ofensivo y la más reciente en 2015 contra LA Clippers donde se fue a un 3-15.
Kawhi trató de remediar su mala noche de cara al aro ejerciendo como generador de juego, repartiendo un total de 8 asistencias, quedándose a tan solo una de su máximo de carrera en los Playoffs (2019 vs Bucks).
¿Cómo consiguieron los Nuggets frenar a uno de los mejores jugadores de la NBA en su mejor momento? Vamos a analizarlo.
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La estrategia contra Kawhi Leonard fue muy sencilla pero nada fácil de ejecutar por las complicaciones que entraña. En definitiva, los Nuggets centraron toda su defensa en perseguir al alero y saltar sobre él ante cualquier penetración. Esto supone tener a más de un defensor sobre el balón cuando este va directo al aro así como un sistema de ayudas pendiente de reducir el espacio visual del que el manejador dispone. Veamos dos ejemplos:
En la primera podemos ver cómo Jokic mantiene su posición tras el bloqueo directo en lugar de alinearse y hundirse con el que realiza la pantalla para defender en flat como es habitual en los Nuggets. Aunque el serbio no reacciona en el timing adecuado ni salta agresivo al flash o trap, ocupa el espacio suficiente para ralentizar a Kawhi y permitir orientarle al lateral y así hacer que la ayuda (Millsap) pueda reducir al máximo el movimiento del alero.
Mientras, en la segunda, Leonard anticipa el flash de Jokic y realiza un split (pasar entre los dos defensores del bloqueo directo), pero de nuevo el serbio es capaz de mantener una posición correcta orientándole a un lateral casi como un muro y facilitando la recuperación tanto de Grant como de Millsap en ayuda.
La clave de estos dos movimientos no es tanto táctica como técnica, ya que Denver ha conseguido analizar muy acertadamente a Leonard en el plano individual. Así, han conseguido anticipar sus movimientos en las finalizaciones, determinando que el alero es muy tendente a las fintas previas a la extensión cerca del aro, acciones que ha llevado a pulir enormemente siendo uno de los mejores en el tiro a la media vuelta y paso cruzado o step through.
A esto cabe sumar que, aunque Leonard puede pasar el balón a un nivel más que alto, ahí quedan sus 4,9 asistencias de promedio en la temporada, no suele hacerlo en la fase terminal de la jugada, sino principalmente en la creación tras bloqueo directo o en lecturas de lado débil.
Estos dos factores dificultan la lectura sencilla del colapso como es la redistribución de balón a esquinas y codos como se suele ver normalmente ante estas propuestas tácticas.
Por otro lado, cabe destacar que la estrategia de los Nuggets pasa también por reducir el impacto de Leonard a través de dobles marcas en el inicio del bloqueo directo en caso de que sea entre exteriores como sucede en esta acción con Michael Porter Jr.
En esta en concreto, Kawhi lo anticipa y vuelve a romperlo en un split, pero Denver colapsa de nuevo y va al robo aprovechando el alto bote que siempre mantiene el jugador de Clippers.
Como apunte, el plan de los Nuggets también incluyó fintas desde esquina (stunts) para frenar aún más a Leonard y que derivó en pérdida o fallo.
Como bien mostraron los Mavs en la anterior ronda, Leonard tiende a sufrir cuando se empareja con jugadores más grandes y pesados como pudo ser Maxi Kleber que dio el máximo y al cual los números no hicieron justicia, dejando a Kawhi en un 50% de acierto en tiros de campo pero un 23% en triples. Esto se ha reproducido en la serie ante los Nuggets ya que frente a Jerami Grant se ha quedado en un 46.7% en tiros de campo y un 25% en triples. Aunque la muestra es muy reducida, las 6 posesiones en las que se ha emparejado contra Millsap el veterano ha sacado mucho partido, permitiendo un 2-6 en tiros de campo como se puede ver en uno de los cortes anteriores.
Esto, de nuevo, tiene una explicación técnica. Y es que aunque Leonard es uno de los que mejor juego de pies tiene de toda la liga, arrancando muy bien cruzado y en disposición en drop, lo que le permite impactar y aguantar en el aire hasta soltar la bola en la finalización, carece de una explosividad que otros exteriores sí tienen. Lo cual no significa que no pueda dejar atrás a un defensor en un momento concreto, como ya ha demostrado antaño, sino que no se trata del punto fuerte de su juego. De este modo, cuando Leonard ataca a jugadores con movilidad lateral rápida o una buena capacidad de reacción.
Mike Malone y su staff han hecho un gran trabajo ajustando en la serie para conseguir empatarla y volver a estar en disposición de luchar por estar en las Finales de Conferencia.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.