Superada la primera parte de la temporada 2020-2021 de la NBA, los equipos afrontan la fase más determinante del curso, en donde realmente se van a jugar todo. La carrera por los Playoffs, la definición del Play-In, la fecha límite de traspasos y la batalla por los diferentes premios individuales estarán en el horizonte de los protagonistas del juego.
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Con todo abierto y por decidir es momento de mirar al futuro y tratar de adivinar qué sucederá y quiénes serán sus protagonistas. Desde NBA.com en español destacamos cinco historias a seguir en la conclusión de la Fase Regular, que se reanuda este miércoles con dos partidos: Memphis Grizzlies vs. Washington Wizards y Dallas Mavericks vs. San Antonio Spurs.
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Phoenix Suns, ¿candidatos?
Cuando Phoenix se lanzó a la piscina traspasando a dos de los jugadores que habían sido clave en su resurgimiento el pasado año como eran Kelly Oubre Jr. y Ricky Rubio, estaba claro que la apuesta iba a ser regresar por todo lo alto a los Playoffs. No solo volver a estar en la zona noble, sino optar a tener una carrera larga y productiva en el Oeste. Las llegadas de Chris Paul y Jae Crowder han aportado el grado justo de veteranía y experiencia que el grupo necesitaba, permitiendo destapar todo el potencial de un Devin Booker al mejor nivel de toda su carrera, siendo más eficiente y con una toma de decisiones más pulida que han favorecido su segunda nominación para el All-Star Game.
El equipo dirigido por Monty Williams se ha establecido como un grupo maduro, con las ideas muy claras y que ha conseguido desplegar una excelencia defensiva que no se veía en Arizona desde la temporada 2000-2001, cuando terminaron siendo la segunda mejor defensa de la liga. En estos momentos los Suns poseen el tercer mejor registro en ratio defensivo de la competición (108,2), permiten apenas 107,1 puntos a sus rivales y son el segundo equipo que menos triples concede a sus oponentes.
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Todo esto acompañado de un sistema ofensivo rápido y dinámico que encuentra en la cohesión entre CP3 y Booker el equilibrio perfecto, sumando un gran peso del bloqueo directo que hace de Phoenix un conjunto temible. Su progresión en el mes de febrero es tremenda, ganando 12 de sus 15 encuentros y cerrando la primera mitad del curso como el segundo mejor equipo del Oeste (24-11), por delante de los vigentes campeones y los Clippers, eternos aspirantes.
Los Suns no han entrado en los Playoffs desde la temporada 2009-2010, en la cual solo participó el propio Chris Paul. Parece seguro que Phoenix estará en la postemporada pero, ¿lo hará como un firme candidato al anillo?
El renacimiento de los Knicks
La llegada de Tom Thibodeau a la Gran Manzana fue recibida con ciertas reservas. La narrativa que acompañaba al veterano técnico y su complicada salida de los Minnesota Timberwolves no apuntaban a que Thibs pudiese ser el indicado para relanzar a una franquicia histórica como los Knicks. Sin embargo, pronto quedó claro que el equipo neoyorquino estaba hecho a la medida del entrenador con un compromiso colectivo, una conexión y una organización sin precedentes en la franquicia desde hacía más de un lustro.
En tan solo 37 partidos los Knicks han pasado de ser la séptima peor defensa de toda la NBA a la segunda mejor, tan solo por detrás de los Lakers. Todo gracias a Thibodeau.
El veterano entrenador ha establecido en Nueva York un sistema que asfixia a los rivales durante 48 minutos, llevándolos progresivamente a cometer errores en el lanzamiento, siendo el equipo que menor porcentaje en tiros de campo concede a sus oponentes (43,5%), así como en triples (33,0%). Todo esto ha tenido como consecuencia que sean los que menos puntos permiten por noche de toda la NBA con 104,4. La defensa es un síntoma de compenetración y cohesión de grupo y una manera perfecta de construir una identidad. Los Knicks están dando los pasos adecuados para relanzar su proyecto y volver al lugar de donde nunca debieron irse.
Ahora bien, mantener este nivel en un plantel que posee la tercera media de edad más joven de toda la liga (24,46 años) parece complejo, más aún si tenemos en cuenta que los Knicks tendrán el quinto calendario más exigente de toda la competición, midiéndose por partida doble a Suns, Lakers y Sixers. Parece difícil que el conjunto de Thibodeau pueda mantener esa quinta posición en el Este, sobre todo porque Miami Heat, Toronto Raptors, Indiana Pacers y Atlanta Hawks están todavía lejos de su posición natural. Se viene un cierre de curso clave para los neoyorquinos.
La lucha por el Play-In
Una de las novedades que trajo consigo la temporada 2020-2021 tras el éxito que tuvo en la burbuja fue la introducción de un Play-In, que en otras palabras, significa una mayor disputa por los puestos de Playoffs independientemente del balance. En este formato competitivo los equipos clasificados entre el 7° y el 10° se medirán por los dos últimos puestos de acceso a los Playoffs una vez concluya la Fase Regular. Si quieres saber más sobre el formato competitivo, hacé click aquí.
La introducción de este modelo va a añadir una mayor emoción e igualdad en la recta final del curso comparado con otros años ya que si antes un equipo ubicado en el 11º puesto podía dejarse llevar en la segunda mitad del calendario debido a la distancia con el 8º, ahora un par de semanas en positivo podría salvar toda una temporada.
La clasificación está más comprimida que nunca en la zona media. En el Este apenas hay 3 partidos de distancia entre el 4º clasificado (Boston Celtics, 19-17) y el 11º (Atlanta Hawks, 16-20). Mientras que en el Oeste los equipos involucrados son menos con 5 encuentros de diferencia entre el 7º (San Antonio Spurs, 18-14) y el 11º (New Orleans Pelicans, 15-21).
Con el trade deadline (25 de marzo) en el horizonte y muchos equipos perceptibles de realizar cambios, la definición de la clasificación y la carrera por concretar quiénes tomarán parte en el Play-In es sin duda uno de los alicientes de la segunda mitad del calendario.
El MVP más abierto en años
El segundo galardón al Jugador más Valioso que recibió Giannis Antetokounmpo por su rendimiento en la 2019-2020 lo descartó virtualmente de la contienda para conseguirlo en la presente campaña, puesto que solo tres jugadores lo han logrado en toda la historia. Esto ha abierto más que nunca la carrera por ver quién era capaz de hacerse con el trono del griego con posiciones enfrentadas y amplias posibilidades para una larga lista de figuras.
En la última votación del staff de NBA.com se eligió a Joel Embiid como el que más opciones tenía de lograrlo, y es que el pivote de los Sixers ha conseguido finalmente dejar atrás sus problemas físicos para convertirse en alguien capaz de llevar a su equipo al siguiente nivel. Algo que contrasta en cierto modo con el segundo candidato, Nikola Jokic, cuyo rendimiento parece haber conocido un nuevo techo al dar un paso adelante como anotador, pasando de 19 a 27 puntos por noche y dejando unos registros como pasador nunca antes vistos en un pivote. De hecho, según la fórmula estadística de Basketball-Reference, el serbio tendría un 46,1% de probabilidades de llevarse el MVP mientras que Embiid tan solo un 15,3%.
Aquí es donde entra en juego el papel del equipo, ya que desde 2017 ningún jugador de un equipo fuera del primer puesto de su Conferencia ha logrado el galardón, algo que extendido en el tiempo la tendencia marca que esa figura ha de estar en el Top 3 de la clasificación como mínimo. Los Nuggets son ahora mismo el sexto clasificado del Oeste y están a 2,5 partidos del tercer puesto, si Jokic aspira al MVP los de Colorado deben dar un paso al frente.
Por otro lado no se puede olvidar otras candidaturas que sí se encuentran en una posición relevante en la tabla como la de James Harden en Brooklyn Nets, a quien la fórmula antes mencionada le otorga un 16% de probabilidades, la segunda mejor de hecho. Y es que el escolta ha recuperado en su nuevo equipo su versión más creativa como manejador, liderando a los neoyorquinos a una eficiencia ofensiva altísima. Mientras, el eterno candidato, LeBron James, sigue manteniéndose en la conversación gracias a su narrativa y edad (36), aunque su rendimiento haya decaído en las últimas semanas.
Los movimientos del mercado
El 25 de marzo concluirá el periodo de traspasos en un trade deadline que apunta a ser impredecible. Llegados a estas fechas siempre se habla de que hay compradores y vendedores, equipos en busca de mejorar su plantel y otros abiertos a negociar. Pese a esta tendencia, en esta temporada no parece estar muy claro qué franquicias estarán dispuestas a comerciar con los integrantes de sus rosters, pese a que sí pueda haber un gran número de equipos disponibles a realizar traspasos.
Uno de los conjuntos que más podrían moverse son los Boston Celtics, los cuales cuentan con una trade exception muy voluminosa que les permitiría asumir un jugador con un alto salario sin que eso afectase a su límite salarial. Algo que dado el irregular rendimiento del plantel y la presencia de varias piezas rindiendo por debajo de lo esperado podría llevarlos a utilizar una parte de la TPE y hacerse con un expiring veterano que les encaje.
Junto a ellos se encontrarían otros equipos como Miami Heat o Toronto Raptors, todavía lejos de las posiciones que podrían haber esperado en un primer momento del curso y que visto su historial de movimientos no sería extraño verlos en conversaciones. En el Oeste las franquicias en plena lucha por evitar el Play-In y entrar en zona de Playoffs, es decir, Golden State Warriors y Dallas Mavericks, podrían optar por un cambio de rumbo en sus rosters aprovechando que cuentan con contratos relativamente fáciles de mover y que les darían un mayor empaque.
En cuanto a los llamados vendedores podría hablarse de conjuntos como Houston Rockets, donde Victor Oladipo rechazó recientemente una extensión de contrato ya que será agente libre este verano; New Orleans Pelicans con varios jugadores con mucho mercado como JJ Redick o Eric Bledsoe; o incluso Orlando Magic, a quien las lesiones lo han dejado sin opciones en esta temporada por desgracia.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
