Las expectativas de LA Clippers en la 2019-2020 pasaban únicamente por conseguir el campeonato o bien superar a sus rivales de ciudad, los Lakers, después de que se llevasen a dos de los mejores jugadores del momento como eran Kawhi Leonard y Paul George, que junto al elenco de defensores ya establecido apuntaron alto. Sin embargo, la falta de química dentro y fuera de la cancha, sumada a una carencia de estructuración en la franquicia para asumir el reto de un equipo de esta entidad fue una de las razones que impidió a los californianos hacerse con el anillo.
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Pese al desenlace y el resultado, el mantra al interno de la organización sigue siendo el mismo, al menos así lo ha expresado una de las patas fundacionales del mismo como Paul George, que estuvo lejos de su mejor nivel en los últimos Playoffs, incluyendo el definitivo Juego 7 ante los Nuggets que supuso el final de la temporada para el alero, donde terminó con 10 puntos y un 25% en tiros de campo.
"Soy mi crítico más duro", dijo el jugador de los Clippers ante los medios de comunicación sobre su final de temporada y el rendimiento general. “Sé lo que no está bien, lo que es inaceptable. El año pasado fue un año inaceptable para mí. Yo sé eso".
Y es que la pasada campaña fue un calvario individual para George, que se mantuvo durante todo el curso en una dinámica de gestión de cargas tras pasar por quirófano para ser intervenido de ambos hombros, razón por la que no pudo encadenar una racha positiva de manera continuada y le privó de ser All-Star por primera vez desde 2015, año en el que regresó tras su escalofriante lesión en la pierna derecha.
"No era yo mismo. No pude hacer las cosas en las que era bueno o con las que me sentía cómodo porque mis hombros no estaban en el máximo rendimiento", reconoció PG. “Sé que el año pasado fue un año difícil para mí. Lo bueno de eso es que solo tengo 30 años, todavía tengo muchos años en el tanque. Me dio una gran motivación de cara a esta temporada. Estoy listo para sumergirme en esto y dar todo lo que tengo".
Tras la decepción de la eliminación a manos de los Nuggets en Semifinales, los Clippers se han repuesto colocando a Ty Lue al frente del banco y han cambiado a Montrezl Harrell por Serge Ibaka como referencia interior, movimientos con los que esperan sacar todo el potencial de un plantel que cuenta con dos de los mejores jugadores de toda la competición.
“Nuestro objetivo final es asegurarnos de que este sea un entorno ganador”, dijo George. “Entonces todo se arreglará solo”.
George entra en una temporada clave para su futuro pues al término de la misma podrá optar a ser agente libre o bien prolongar su vínculo con los Clippers aceptando su opción de jugador. Sin embargo, el alero podría rechazar esa misma cláusula y extender su contrato antes de que comience este curso, del mismo modo que hizo LeBron James hace unos días. "Me quiero retirar como Clipper, es donde mi corazón está", aseguró PG.
En apenas dos semanas, George y Clippers darán comienzo a su temporada 2020-2021 por todo lo alto, abriendo contra los Lakers el 22 de diciembre.
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