La baja de Joel Embiid es un duro golpe para Philadelphia 76ers. Más allá de desconocer el alcance real de la lesión -tiempo de recuperación y calidad de su juego mientras tanto- toca pensar en el equipo de Doc Rivers sin su titán en cancha. ¿Cómo funcionan y pueden funcionar sin él?
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Para empezar, un dato que quizás no es evidente: los Sixers pierden a su segundo mejor anotador en la serie ante Washington Wizards. Mientras Embiid promedia 24 puntos, Tobias Harris lidera al equipo con 24,3 tantos en los cuatro partidos. El alero firma series de tiro de 50% en campo y 37,5% en triples, aunque los intentos exteriores son reducidos. De hecho, solo representan 4 de su 20. Y los 20 tiros intentados de Harris por partido también superan los 13 de Embiid, acostumbrado a recibir dobles marcas.
Entonces, ¿quién asumirá los 13 tiros de Embiid? La primera y más obvia respuesta sería que una parte de ellos recalarán en Harris, algo que sucederá seguro, pero el jugador llamado a tener mayor peso ofensivo es Ben Simmons. El base australiano firma 13,8 puntos, 10,3 rebotes y 8,8 asistencias en la serie con un 64% en tiro. Fantástico, ¿no? Para nada. Los números esconden que, si bien aporta de gran manera en diferentes facetas, sigue restando su inexistente tiro, su poca agresividad buscando el aro y el problema de los tiros libres: lanza 5 por partido con un pobre 25%. Los Wizards le hacen falta para recortar ventajas. Hack-a-Simmons.
— Philadelphia 76ers (@sixers) June 2, 2021
Dwight Howard apunta a pivote titular cuando Embiid no juegue. De hecho, entre los quintetos más utilizados de los Sixers siempre figura un centro. La mejor alternativa para JoJo ha sido Tony Bradley, pero salió en el traspaso por George Hill. Howard no ofrece el mismo rendimiento que tuvo con los Lakers en la 2019-2020, cuando fue uno de los interiores de banco más útiles de la competición.
Entonces, ¿qué alternativa tiene Doc Rivers? Philly basa su tasa de éxito en la defensa. Tener un pivote de tamaño es fundamental para su esquema, pero sin Embiid se quedan cojos. ¿Es tarde para cambiar el esquema? En Playoffs es más habitual ver a los equipos jugar pequeño y los Sixers tienen dos opciones. Veamos cuáles son.
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Primera opción: Mike Scott como pivote abierto en small-ball | Una opción habitual en las alineaciones de Rivers. De hecho, según el portal Cleanning The Glass, el quinteto formado por Simmons, Seth Curry, Danny Green, Harris y Scott es el segundo más utilizado en posesiones esta temporada. Además, si consultamos la estadística avanzada, produce 111,2 puntos por cada 100 posesiones, una de las mejores marcas de la temporada de Philadelphia para las formaciones sin Embiid.
¿Qué ocurre? Scott ha jugado poco esta temporada y ofreciendo un rendimiento pobre. Promedios de 4,2 puntos y 2,4 rebotes con 34,2% en triples en 16,7 minutos. Papel secundario en temporada regular que queda relegado en Playoffs. Ha jugado 28 minutos en tres partidos de la serie con 6 puntos convertidos desde el exterior (2 de 6, 33,3%). Tenerlo en cancha reduciría la potencia ofensiva, pero permitiría un falso cinco que abre la cancha. Esta vía serviría para potenciar más que nunca a Simmons, que está obligado a ofrecer la mejor versión de su carrera.
Segunda opción: small-ball puro con Simmons como jugador más alto | En más de una ocasión se ha comentado la hipótesis de darle a Ben un equipo para él. Que sea la referencia creadora por excelencia, sin un pivote de poste como Embiid al lado y rodeado de unos tiradores que en Philadelphia siguen faltando (Green y Curry son los únicos especialistas). Rivers podría juntar a sus cuatro titulares restantes -Simmons, Curry, Tobias y Green- y elegir entre dos piezas principales. O bien Matisse Thybulle, defensor de primer nivel, pero de limitaciones en ataque; o George Hill, un veterano fiable en el tiro y que ayudaría en la generación.
Seguramente la vía con Hill sería la más sana. Promedia un 60% en triples en estos Playoffs, aunque su volumen de intentos es reducido. Hill es un jugador llamado a tener mucha más presencia sin Embiid, ya que Howard también tiene la limitación de las faltas. El tirador Furkan Korkmaz, siempre irregular, o el joven y prometedor Tyerese Maxey serían otras alternativas.
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Philadelphia es, hasta la previa del Juego 5 (miércoles a las 18 de México, 20 de Argentina), el sexto ataque más eficiente de los Playoffs con 120 puntos por cada 100 posesiones. Sin embargo, la diferencia es abismal sin Embiid en cancha. Harris asumirá más tiros y lo normal será verlo por encima de los 25. Igual con Seth Curry, poco fino en la eliminatoria. Aunque la llave para destapar el potencial en ambos lados está en Ben Simmons, candidato a Defensor del Año y pasador de élite, pero cuya anotación debe ser descarada y agresiva en este adverso momento para los Sixers.
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