Lejos de la supremacía garantizada de años anteriores, los Warriors encaran la 2019-2020 con una imagen renovada y repletos de incógnitas. Una de ellas pasa por la convivencia en cancha entre Stephen Curry y D´Angelo Russell, adquirido vía traspaso durante el receso. Ya sin Kevin Durant y con Klay Thompson afuera durante varios meses, está claro que será la mediacancha la que cargue con la mayor responsabilidad ofensiva de Golden State.
¿Cómo se dará esa relación entre dos talentos? Steph se refirió a la misma durante la atención a la prensa en el campo de entrenamiento, remarcando que ya han desarrollado una estrategia junto a su nuevo compañero: "No es un secreto que a mi me gusta jugar con la pelota y fuera de ella. Sé que él (Russell) puede hacer lo mismo. Nuestra fórmula es que el que agarre el rebote avance con la bola y el otro que corra. Va a ser divertido de ver ".
Parte de esa táctica se vio en los minutos en los que ambos compartieron cancha ante los Lakers, durante el estreno de los californianos en la pretemporada 2019/2020. Allí jugaron 18 minutos cada uno, con rendimientos dispares: Curry sumó 18 puntos, mientras que su compañero totalizó 4 unidades. Nada para preocuparse, por supuesto.
Todo indica que Curry y Russell se complementarán en la base del equipo, tal como ha sucedido recientemente con los Houston Rockets de James Harden y Chris Paul. Pero, ¿qué configuración sería la más adecuada por las características de ambos? Las estadísticas de Synergy Sports pueden ayudarnos:
| Jugador | Aislamiento | Pick and Roll | A Pie Firme | Entre Cortinas |
|---|---|---|---|---|
| Steph Curry | 5,6% | 21,6% | 13,0% | 20,1% |
| D´Angelo Russell | 10,8% | 49,9% | 11,7% | 3,1% |
Los números hablan a las claras. Mientras que Russell utiliza casi la mitad de sus posesiones desde el pick and roll (5° porcentaje más alto de toda la 2018/19), Curry reparte mucho más sus intentos entre la creación desde el drible y el ataque sin pelota (a pie firme o moviéndose entre cortinas). Por ende, si nos guiamos por los antecedentes de ambos, sería Russell quien debería tener el mayor tiempo la bola en sus manos, permitiendo que Steph atraiga marcas y genere espacios.
Pero atención: porque si algo ha caracterizado a los Warriors de Kerr es el movimiento de pelota y de hombres. Por esto, es difícil imaginar a un Russell acaparando tanto el balón como en Brooklyn. Sobre todo, si al lado cuenta con uno de los bases más talentosos de todos los tiempos. Golden State no cambió su manera de jugar por Kevin Durant. Tampoco lo hará por su flamante refuerzo estrella.
El desafío principal entonces, recae en el propio Russell. Mientras que Curry ya ha dado muestras claras de poder ceder protagonismo en pos del bien colectivo, el ex Nets deberá demostrar que puede adaptarse, encajar en la maquinaria de los Warriors y al hacerlo, acallar cualquier especulación que pueda existir sobre la duración de su estadía en San Francisco. Es cierto, Steph: va a ser divertido de ver.
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