La regla de George Karl a sus jugadores: no estar con Michael Jordan en las Finales NBA

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George Karl y Phil Jackson

Las Finales NBA de 1996 entre Chicago Bulls vs. Seattle SuperSonics se recapitularon en el capítulo 8 de “The Last Dance”. Los dos mejores equipos de esa temporada se dieron cita, con Michael Jordan como protagonista después de regresar al básquetbol en 1995 y en busca de su cuarto campeonato.

Entre las anécdotas que se dieron previo a la serie, Ahmad Rashad, comentarista para NBC, y Su Majestad contaron que previo a que empezara la serie se encontraron con George Karl, entrenador de los Sonics, en un restaurante y este último no se acercó a saludarlos, lo cual provocó que esas Finales se convirtieran en algo personal para Jordan.

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“Pasó al lado de mí. Y lo miré y dije: ¿de verdad? ¿Así quieres jugar?”, relató Michael en la serie documental. “Solo necesité que él hiciera eso y se volvió algo personal para mí”, añadió. Cabe mencionar que ambos pasaron su época universitaria con los Tar Heels, se conocían y habían jugado al golf juntos. ¿La consecuencia? Promedió 27,3 puntos, 5,3 rebotes y 4,2 asistencias.

Karl, un tipo polémico, lo hizo porque no querían que vieran a la leyenda de los Bulls como un héroe, sino como alguien al que podían vencer. E incluso fue más allá de eso y le dio indicaciones a sus jugadores de no estar con Jordan, ni tampoco pedirle autógrafos.

Pero al parecer, hubo alguien que no acató esa regla: Gary Payton. La serie, después de que Chicago se puso 3-0, George y su staff cambiaron el rumbo cuando el base comenzó a marcar al de Carolina del Norte y lograron ponerse 3-2.

La razón por la que desde el principio no fue así es porque Gary tenía un músculo desgarrado en la pantorrilla y no querían sacrificarlo en el costado ofensivo.

George Karl y Gary Payton

El coach de los Sonics, según explica en su libro Furious George, contó que les pidió que no se vieran como fans de Michael Jordan: “Incluso si sus hijos les piden un autógrafo de él (Jordan), no los quiero ver con él, comprándole una taza de café o salir a cenar. Pensarán que es su amigo, pero los estará suavizando”.

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Sin embargo, Payton no acató esa regla. Ahmad Rashad, después de que se reveló el capítulo 8, contó que Gary le pidió sus zapatillas a Jordan después del Juego 1 y ahí supo que estaba en su cabeza.

Después de seis partidos, Chicago venció a Seattle para conquistar el cuarto título.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

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