Con el paso de las semanas los Toronto Raptors van pareciéndose mucho más a lo que nos tenían acostumbrados en los dos últimos años. Nick Nurse ha conseguido relanzar la candidatura de los canadienses recuperando su identidad, o más bien dándole otra dimensión, algo que comprobaron los Philadelphia 76ers en el último partido donde el equipo asentado en Tampa venció 110 a 103.
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Con el encuentro controlado por parte de los Sixers entrando al último cuarto la distancia era corta (+3) pero la sensación era que los de Doc Rivers manejaban los tiempos y estaban en disposición de sentenciar el choque. Sin embargo, Nick Nurse presentó una alineación que decantaría el duelo a favor de los canadienses en un abrir y cerrar de ojos.
Con DeAndre' Bembry, OG Anunoby, Pascal Siakam, Fred VanVleet y Terence Davis en cancha los Raptors consiguieron un net rating en el último asalto de +7 en los 5 minutos que estuvo en cancha, dejando a los Sixers en el último cuarto en apenas 76 de rating ofensivo. Los canadienses consiguieron anotar 17 de sus 27 puntos finales con un acierto del 87% en tiros de campo con esta alineación en pista.
Una vez más, la mejor versión de Toronto vino de la mano del small ball, que expuso los problemas de los 76ers para llegar a cubrir toda la extensión del campo por las distancias que cubrían tanto Siakam como Boucher. El hecho de apostar por un formato tan relativamente pequeño contrastó con lo que Philly tuvo en cancha durante buena parte del último cuarto con Tobias Harris, Ben Simmons, Danny Green y, o bien Dwight Howard, o bien Joel Embiid. En cualquier caso, los visitantes se vieron superados con creces por unos Raptors que hicieron circular el balón a un ritmo altísimo y redujeron el poder de sus rivales en llegada.
"Si vas a jugar bien en defensa, es un buen momento para hacerlo", dijo Nick Nurse. “Realmente es el momento de hacerlo. Hablamos un poco sobre cómo este es el momento más importante para levantarse y ponerse en guardia y ese debe ser nuestro máximo esfuerzo. Dejarlo en la cancha en el último cuarto. Hemos estado haciendo un buen trabajo en eso".
"Es un año largo, tenemos mucho baloncesto frente a nosotros, y nos mantenemos firmes y seguimos tratando de mejorar cada día, cada partido", aseguró VanVleet. "Va a haber altibajos, pero creo que nos estamos encontrando a nosotros mismos y creando una identidad. Necesitas crear una identidad cada año y parece que lo estamos encontrando aquí últimamente, pero tenemos que mantenerlo".
Formatos como el presentado ante los Sixers en versiones muy variables, pero con el núcleo formado por Siakam, VanVleet y Powell siempre presente, están detrás del reciente éxito de Toronto que sumó su cuarta victoria seguida gracias a ello. De las cuatro alineaciones puramente small ball que han acumulado más de 18 minutos este año, tres tienen rating positivo (+22, +40 y +10), curiosamente sin la presencia de Kyle Lowry que sigue lesionado, ya que con él la diferencia baja a +1.4.
No sería extraño ver que Toronto apuesta en firme por un equipo puramente centrado en alineaciones pequeñas o bien con interiores más móviles, dando mayor protagonismo a Chris Boucher, autor de 17 puntos ayer. De este modo los canadienses recogerían el guante de los Rockets como los adalides del baloncesto moderno, abierto y dinámico.
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